Bibliografía pospetróleo

Adjuntamos el enlace a una extensa y completa bibliografía pospetróleo que ha organizado el Colectivo Asociación touda y que empieza con una colección que se irá ampliando con posterioridad de forma considerable

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Acerca de esta bibliografía online


EL CINISMO HUMANITARIO OCCIDENTAL

Tiemblen, si quieren, las clases gobernantes, ante la perspectiva de una revolución comunista. Los proletarios, con ella, no tienen nada que perder, como no sea sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo entero que ganar.
¡Proletarios de todos los países, uníos! .»
Karl Marx. El Manifiesto comunista

Pateras 2

Lejanos ya aquellos días del internacionalismo proletario, denostado hasta la saciedad (en el opulento Occidente, que también aumenta sus desigualdades internas), el intento marxista de unir a los proletarios en condiciones de vida dignas y asomados hoy a la realidad espantosa de unas desigualdades crecientes, vemos una brecha cada vez más insalvable.

El intento utópico marxista de principios del siglo XX no cuajó finalmente, aunque su primer golpe (parto doloroso, sin duda) fundió en una igualdad considerable distintas repúblicas al hacerse soviéticas. No trata este artículo de volver a hurgar en las causas o incluso logros de aquel fallido intento, ni tampoco aceptaría que nadie denostase y tachase de imposible la visión de un mundo más igualitario y justo que originalmente se proponía.

De otra forma, no tendrían sentido, salvo el de un cinismo galopante, las voces que hoy gritan escandalizadas por los miles de ahogamientos en el Mediterráneo y los portavoces que se rasgan las vestiduras y claman que hay que hacer algo por estos desheredados, los nuevos proletarios que surgen como zombis de la nada, cuando occidente ya creía superado el propio concepto de proletariado.

Aquí no me rasgaré las vestiduras por estas enormes desgracias humanas, sino que trataré de ofrecer una visión más “marxista”, en el sentido de “materialismo histórico”, que trataba de analizar el mundo con un método científico. Van pues, los datos para ayudar a conocer nuestra triste realidad.

20150421 Mapa del mundo con PIB per capita

20150421 Tabla de PIB

Figura 1, PIB per cápita en 2013, según el Fondo Monetario Internacional. Datos de Wikipedia. http://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Pa%C3%ADses_por_PIB_%28PPA%29_per_c%C3%A1pita

Si observamos el Producto Interior Bruto por persona en el mundo, vemos unas brutales desigualdades entre países, especialmente entre los de origen de los viajes desesperados en patera o en trenes de la muerte o con coyotes y los países de destino con los que estos desesperados sueñan.

Aunque ciertamente la economía no explica todo en este mundo, existe una muy fuerte y estrecha vinculación entre el nivel económico de una población y uno de los valores más queridos por el occidente desarrollado: la esperanza de vida.

Si observamos el gráfico de la figura 2, vemos que la esperanza de vida a la que puede aspirar una comunidad o un pueblo, tiene una relación muy directa con un cierto nivel de PIB

20150421 Esperanza de vida y PIB

Figura 2. Relación entre esperanza de vida de los diferentes países del mundo y su renta o PIB per capita. Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Renta_per_c%C3%A1pita

Lo importante de este gráfico es mostrar que la esperanza de vida sube muy directamente como la espuma cuando los niveles de PIB son ínfimos, con cada poquito de subida del PIB por persona. Y también muestra, que a partir de un cierto momento (en torno a los 10.000 dólares de PIB por persona y año, grandes aumentos de los ingresos no conducen a vivir mucho más.

Otra forma de verlo es con el indicador llamado índice de Desarrollo Humano (IDH)

20150421 IDH

Figura 3. Relación entre Índice de Desarrollo humano (IDH) de los diferentes países del mundo y su renta o PIB per capita. Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Renta_per_c%C3%A1pita

Este índice, adoptado por Naciones Unidas mide más el bienestar humano que la riqueza material o la simple duración estadística de la vida humana promediada. La curva tiene también una relación muy estrecha con el PIB por persona. Y también muestra que incrementos pequeños de riqueza para los más desheredados pueden producir mucho bienestar y alcanzar ciertos niveles de dignidad humana (hacia el 0,7 ya se estaría en ellos), mientras que con incrementos importantes del PIB per capita no se mejora sustancialmente en mucho más desarrollo Humano.

Pero sigamos analizando. El consumo de energía primaria en el mundo (que integra consumos particulares de cada tipo de energía, hasta la que se consume de forma eléctrica, que es de más calidad y exige más desarrollo), tiene también otra mirada similar, como ya he mostrado en otras ocasiones.

20150421 IDH vs Energía

Figura 4. Fuente: Datos de United Nations Development Program. http://www.thewatt.com/node/170

También aquí la curva de los países muestra que con muy poco aumento de consumo de energía por persona, se pueden alcanzar cotas de desarrollo humano (bienestar humano) considerables. E igualmente, que a partir de un cierto nivel de consumo, situado en unos 2.000 kilos de petróleo equivalente por persona y año, el bienestar no aumenta de forma relevante, aunque el consumo de energía por persona se multiplique cinco o seis veces. Otra reveladora identidad de nuestra realidad mundial.

El gráfico tiene dos variantes que siguen mostrando esta identidad de relaciones y sacando a la luz el drama de los desequilibrios enormes entre los distintos países del mundo. Una de ellas es la representación, con una curva igualmente de relación muy directa con las anteriores y que vincula a su vez el nivel de desarrollo humano (bienestar) y las emisiones de CO2 por persona y país. De nuevo se muestra que se puede emitir poco y mantener un nivel de desarrollo humano digno y que aumentar las emisiones de forma desaforada no condice necesariamente a un mucho mejor nivel de bienestar humano

20150421 Emisiones vs IDH

Figura 5. Emisiones de CO2 por persona y año frente al nivel de desarrollo humano por países. Fuente http://www.thewatt.com/node/170 con datos de United Nations Development Program

20150421 huella vs IDH

Figura 6. http://en.wikipedia.org/wiki/Sustainability

La otra variante es la de la figura 6, que muestra la relación existente entre el desarrollo humano (bienestar human)o que tienen o disfrutan los ciudadanos de algunos países y la huella ecológica que generan estos mismos países. De nuevo, se observa que para vivir bien o con un mínimo de dignidad o bienestar humano, no es necesario consumir desaforadamente.

Pero si volvemos a la relación entre consumo de energía y nivel de PIB por persona en todos los países y grandes regiones del mundo, la figura 7 es bastante incontestable:

20150421 Consumo de energía por países y regiones y PIB

Figura 7. Consumo de energía y PIB per capita por países y regiones. Datos BP Statistical Review 2011 y elaboración propia

En la figura se representa el consumo por persona en cada país o gran región, en vatios de potencia equivalente (en negro), y el PIB también per capita de cada país o región, representado por una estrella roja. En el eje de abcisas se representa la población humana. Este gráfico analizado de forma combinada con los anteriores gritan varias evidencias:

1. La relación entre disponibilidad energética y uso de la energía está muy directamente vinculada al PIB de los países y regiones del mundo (ver los niveles de consumo de energía primaria, que son el sumatorio de los distintos tipos de energía y el nivel de PIB representado por la estrella roja de cada país o región.

2. Aproximadamente el 70% de la población humana, que llamaremos de países empobrecidos, vive con el 30% de los recursos energéticos (y por los gráficos anteriores vemos que una proporción similar de los recursos naturales y bienes y servicios), mientras el 30% de la población de los países enriquecidos dispone del 70% de los recursos planetarios. Este brutal nivel de desigualdad explica muchas cosas sobre las tragedias migratorias y las crisis humanitarias. La desigualdad ha ido creciendo con el tiempo y sólo la limitación de algunos recursos claves, entre otros el petróleo, ha propiciado que algunos países empobrecidos, llamados emergentes, con una masa crítica suficientemente grande, hayan podido reducir ligeramente estas desigualdades con los países enriquecidos, aunque también, copiando a los países enriquecidos, a base de detraer en beneficio propio del pastel general o mundial de recursos del que disponen países empobrecidos y enriquecidos.

3. Si la energía es la capacidad de realizar trabajo y el trabajo es la esencia de la actividad humana que determina el nivel de actividad económica, disponer de energía y del control de sus mecanismos de exploración, extracción, transporte y refino de la misma para su uso, determina bastante fielmente, a su vez, el nivel de PIB y con éste, el nivel de esperanza de vida de las poblaciones del mundo y también el nivel de su bienestar.

4. Al mismo tiempo, el mundo industrial y tecnológico que hemos construido, nos dice que se han alcanzado estas cuotas no si un precio enrome, como es que los que más disfrutan sean los que más contaminan (per capita), aunque sus maquinarias de propaganda nos traten de convencer de lo contrario presentando datos por países y no por persona y también y sean los que consumen como si tuviesen entre tres y cinco planetas como el que tenemos a su disposición. Esto se ve meridianamente claro en las figuras 5 y 6 más arriba.

5. Con los conocimientos que tenemos en la actualidad, sabemos que los recursos energéticos fósiles son finitos. Ya estamos en el cenit de la producción mundial de petróleo y muy pronto en la del cenit del gas y del carbón, que hoy representan un 80% del consumo energético mundial. Si a esto se suma la biomasa, de la que por el agotamiento de los bosques ya no se puede esperar más, tenemos el 90% de nuestra dieta energética actual. El resto es energía nuclear, también limitada en reservas de uranio y con su propio cenit a la vista y energía hidroeléctrica, con la limitación absoluta de uso de embalses en cuencas. Las modernas renovables, apenas producen electricidad y no llegan pese a sus enormes despliegues, ya ralentizados en los dos últimos años ni al 3% del consumo mundial de electricidad, que es el 1% del consumo de energía primaria.

Por tanto, no podemos esperar que en el futuro, ninguna fuente milagrosa de nueva energía venga a solucionar las graves diferencias de uso que hoy existen en el mundo, como se evidencia en la figura 7.

De hecho, incluso aunque surgiese esa milagrosa nueva fuente de energía, hay que plantearse seriamente si habría que hacer uso de ella y seguir destrozando más el planeta con la enorme capacidad de transformación de la naturaleza (no otra cosa es la energía en tanto en cuanto “capacidad de realizar trabajo”) que ofrecería esa nueva fuente.

De nuevo las matemáticas y la ciencia pueden ayudar a analizar los posibles escenarios evolutivos de la sociedad mundial, con el gráfico de la figura 8

En este gráfico se observa que cualquier intento de hacer llegar a los países empobrecidos del mundo a los niveles de, por ejemplo, la Unión europea de los 15 conllevarían, matemáticamente hablando a la necesidad de duplicar el consumo de energía mundial actual que está en los 13.000 millones de toneladas de petróleo equivalente por año.
20150421 PIB y consumo de energía modelos EEUU y Europa

Figura 8. Consumo de energía primaria por tipos de energía y países y regiones

Lo que es peor, cualquier intento de los países empobrecidos de alcanzar el “American Way of Life” o modo de vida americano (ese que el presidente George W. Bush decía que era “innegociable”), implicaría que el mundo debería cuadruplicar su consumo de energía y como consecuencia, también el uso de materias primas y de recursos naturales que conlleva esa mayor disponibilidad de energía, como hemos visto.

Estas diferencias son tan onerosas y alcanzan tal nivel entre países empobrecidos y enriquecidos, que los movimientos como el del 0,7% del PIB, porque el que en Occidente se propone destinar esta cantidad del PIB de los países enriquecidos a la mejora o desarrollo de los países empobrecidos, queda en un ridículo espantoso por su absoluta inutilidad. Supone una nueva y sibilina forma de ofrecer limosna a los empobrecidos para que los enriquecidos puedan dormir más tranquilos. No, es otra la vía que hay que tomar. Ni es el 0,7%, ni el 7%. Está más cerca, matemáticamente hablando del 70% lo que los países enriquecidos deberían ofrecer o entregar o mejor dicho, dejar de esquilmar a los países empobrecidos para alcanzar cotas de equidad, justicia social y equilibrio planetario.
Todavía peor, en la actualidad, de las figuras 6 y 8 se puede desprender que incluso con el consumo tan desigual e injusto que deja a muchos por debajo del nivel de la mínima dignidad humana, mientras otros derrochan como si no hubiese mañana, ya estamos consumiendo como si hubiese un planeta y medio, donde tenemos solo uno. Hemos ya sobrepasado, según Naciones Unidas, el umbral de sostenibilidad planetaria con los consumos actuales y algunos países y regiones enriquecidas, lo han sobrepasado cuatro o cinco veces. Por tanto, malas noticias para los que piensan en que se podrá seguir creciendo. La reducción de la desigualdad y una mejor distribución de la riqueza solo se pueden dar HACIA ABAJO en el consumo de energía y bienes materiales

El SÍMIL DEL CONDENSADOR EN LAS RELACIONES INTERNACIONALES

En electrónica se estudia el comportamiento de los condensadores. Se trata de dispositivos electrónicos que constan básicamente de dos placas conductoras separadas bien por aire, que es un aislante o mal conductor, a veces separadas por el vacío que es un mejor aislante que el aire y generalmente por un material aislante llamado dieléctrico.

20150421 Condensador

Figura 9. Esquema de un condensador

Si se aplica una diferencia de potencial a ambas placas, estas se cargan, una con cargas positivas y otra con cargas negativas de forma proporcional al voltaje que se aplica. La carga que el condensador es capaz de acumular como diferencia entre placas determina la capacidad del condensador. La carga que puede soportar el condensador de diferencia de potencial entre extremos está también en función de la superficie y tipo de placas conductoras en ambos lados, de la llamada permitividad del aislante. Se conoce como rigidez dieléctrica el campo máximo que puede soportar el dieléctrico o aislante de un condensador sin romperse o perforarse por el salto de los electrones en busca de igualar el potencial con las cargas positivas del otro lado. Y se conoce como factor de pérdida de un dieléctrico o aislante la cantidad de energía eléctrica que un condensador puede almacenar con esta diferencia de potencial, debido a las graduales e inevitables fugas de electrones que suceden a través del mismo con el tiempo que el condensador está cargado y soportando esta diferencia de potencial.

Conviene en este punto resaltar que por muy bueno que sea el aislante, hay siempre un nivel de diferencia de potencial suficientemente grande, con capacidad de romper o perforar el dieléctrico o aislante y hacer saltar a los electrones hacia las cargas positivas. El mundo de la electrónica lo que hace es regular de forma ordenada y en su propio provecho, para realizar funciones útiles, las cargas y descargas de los condensadores.

Nuestro mundo se está comportando en estos momentos de manera bastante similar a un gigantesco condensador, pero sobre todo los que vivimos en países enriquecidos nos resistimos a analizar las causas y mucho menos a proponer soluciones que pudiesen amortiguar las desgracias de este mundo. El símil sería algo así:

Las injustas relaciones entre países de los últimos siglos (en terminología marxista, de intercambio desigual), han ido cargando gradualmente de tensión, por un lado a la placa de los países empobrecidos con una carga negativa de electrones. Por el otro, los países enriquecidos se han ido favoreciendo, en le lado de la placa con cargas cada vez más positivas.

20150421 simil de condensador y batería

Figura 10. Símil entre la situación mundial actual y un condensador en carga

Todo especialista en electrónica sabe que si la carga aumenta de forma imparable y constante, hay que ir aumentando el dieléctrico o aislante y mejorando sus propiedades. Este símil se ve perfectamente en muchos lugares, donde los enriquecidos, para proteger sus privilegios, levantan muros como el muro israelí de la vergüenza para aislar a Gaza y a los pueblos de Cisjordania. O las vallas de Melilla y Ceuta o los multimillonarios sistemas de vigilancia costera en el Estrecho de Gibraltar. O con dispositivos pensados más para evitar que los “electrones” del sur salten a la placa del norte a disfrutar de las cargas positivas, como el de la Operación Tritón en Italia, financiada por la Unión Europea, que realmente para ayudar a los desesperados a no ahogarse en el intento. O como el vergonzante muro fronterizo de miles de kilómetros que EE.UU. ha levantado en su frontera con México.

20150421 Dielectricos fronterizos

Figura 11. Algunos ejemplos de “dielectricos” o aislantes fronterizos entra países enriquecidos y países empobrecidos.

Pero al igual que con los condensadores, por mucho aislante o dieléctrico que se coloque, si la diferencia de potencial entre ambos lados es lo suficientemente grande, seguirán saltando los electrones en el condensador y los seres humanos entre fronteras de enriquecidos y empobrecidos. Siempre terminarán los electrones perforando el dieléctrico o los seres humanos rompiendo vallas y muros y eludiendo a las patrullas.

CONCLUSIONES

Hablemos claro y dejémonos de cinismos:

La principal causa de la inmigración africana a Europa o latinoamericana a EE.UU. y similares, es la desesperación de los empobrecidos que no alcanzan un nivel mínimo de dignidad humana y la perversa y engañosa visión de la opulencia y el derroche en el otro lado. Es la creciente diferencia de potencial, el aumento de la tensión y de las desigualdades entre ricos y pobres. Los proletarios están al otro lado de la valla. También están en nuestros soportales, durmiendo en cajas de cartón, aunque no los veamos.

La creciente y vergonzosa diferencia de potencial no se va a poder resolver con engaños falsos prometiendo a los empobrecidos que si se liberalizan alcanzarán nuestro nivel de vida. No hay energía, no hay recursos materiales ni recursos naturales para que todos vivamos como los norteamericanos; ni siquiera como los europeos. Si los hay para alcanzar niveles de vida mínimamente dignos. Ver de alcanzar el cuadrante superior izquierdo de la figura 6 como modelo deseable; un modelo que alcanza un Índice de Desarrollo Humano suficiente para toda su población, pero en un nivel de huella ecológica que no destroza el planeta.

Pero antes de proponer a los empobrecidos (países en el tramo inferior izquierdo de la figura 6) que aspiren a ese modelo austero y difícil y no al modelo consumista y depredador de Occidente, es el opulento Occidente (países en el tramo superior y hacia la derecha de la figura 6), el que tiene que renunciar a esos niveles indecentes de consumo insostenible y proponerse un movimiento hacia el cuadrante superior izquierdo. Esta es la parte más difícil y utópica de la propuesta, porque se trata de los países beneficiados (a costa de la sostenibilidad planetaria y del destrozo y contaminación de nuestro soporte de vida común), se trata de los que poseen la ventaja, el control del comercio, de las finanzas, los que tienen el poder militar; los que muy previsiblemente no quieran, ni sus dirigentes políticos, ni siquiera los más conscientes de sus ciudadanos.

A todos ellos, a todos nosotros, los del lado de la acumulación de cargas positivas, del llamado Estado del Bienestar (a costa de otros y del planeta) un par de sugerencias:

1. Por un lado, a mi no me engañáis con las caridades del 0,7% o con las lágrimas de cocodrilo y los minutos de silencio cada vez que 700 empobrecidos se ahogan o prometiendo presupuestos siempre ridículos para mantas y para acoger en centros a los electrones y humanos que siguen saltando a pesar del dieléctrico. No es suficiente y lo sabéis. No tenéis vergüenza hablando del efecto de llamada, como si los principios físicos se pudiesen vulnerar o las criminales diferencias sociales que hemos creado se pudiesen ignorar o tapar con vallas, con muros, con aviones y barcos, o negociando con gobiernos peleles y crápulas en el otro lado para que hagan las tareas de policía malo y contengan la marea humana lejos de nuestra vista en sus propios países a bastonazos y tiros. Esto solo se arregla rebajando literal y físicamente las diferencias de tensión entre unos y otros y ya sabéis el camino.

2. Os pongáis como os pongáis, el modelo está agotado. Los enriquecidos tienen o tenemos también el destino de terminar en la zona izquierda del cuadro 6, sea por decisión voluntaria o sea por la fuerza de los hechos, cuando los dieléctricos o aislantes terminen por no servir de nada y las tensiones se igualen. Que sea en la parte superior del lado izquierdo, con un nivel aceptable de dignidad humana para todos o que sea el caos completo para todos y todos terminemos en el lado inferior izquierdo, sólo depende de si somos capaces de tomar conciencia de este problema y actuar de forma diferente a una bacteria o a un gen egoísta, como hemos venido haciendo hasta ahora.

Los intentos tradicionales de los poderosos o enriquecidos de frenar la marea humana, esos miles de millones de proletarios del mundo que solo tienen las cadenas por perder y que se empiezan a rebelar serán imparables, mientras haya diferencias onerosas e insultantes y ellos se estén muriendo en la miseria.

Los intentos realizados en las dos últimas décadas para intentar mantener el control de los recursos del planeta, especialmente los energéticos, mediante el uso de la fuerza militar, han probado no sólo que no se han conseguido los objetivos de mantener los privilegios y acallar a los esquilmados, sino que han acelerado el agotamiento del modelo, del que la crisis sistémica y global que padecemos desde hace ya más de siete años es el exponente más visible. Los intentos de controlar el crudo en Oriente Medio han provocado un desastre humanitario sin precedentes en Irak, Siria. También en el norte de África en Libia, lo que ha supuesto este aluvión humano de desesperados lanzados directamente a la edad de piedra desde un nivel de relativo bienestar que antes tenían. Avalancha humana de la que ahora nos lamentamos, con cínicos rasgados de vestiduras de los incapaces de reconocer esta responsabilidad en el desaguisado. Nigeria es otro país que aporta muchos desesperados, mientras seguimos impertérritos extrayendo sus recursos de forma salvaje y sin conciencia. Mientras, en el enriquecido occidente, nos construimos argumentos ridículos que puedan seguir justificando nuestra intervención en defensa del expolio tradicional. La geografía del petróleo ya lo he dicho varias veces, coincide cada vez más sospechosamente con la del terrorismo y especialmente con la del terrorismo islámico.

Depende de nosotros, si. Sobre todo, de nosotros los occidentales.

Pedro Prieto. Madrid, 21 de abril de 2015


OTRA VUELTA DE TUERCA A LA TRE FOTOVOLTAICA

20150419 The PV Energy cliff

A petición de algunos lectores, introduzco los últimos intercambios han tenido lugar últimamente sobre los ya habidos hace un par de años sobre el asunto de la TRE fotovoltaica, a raíz de la publicación del libro “Spain’s Photovoltaic Revolution. The Energy Return on Investment” que publicamos en 2013 un servidor y Charles Hall.

Confío en que los lectores puedan sacar sus propias conclusiones e incluyo los comunicados habidos hasta la fecha. Seguramente seguirá saliendo alguno más y se irá incluyendo en este artículo.

Se incluyen en inglés sin traducción, por la falta de tiempo para traducirlos al castellano. Lamento que los que no puedan leer en este idioma se lo pierdan y dejo abierta la puerta por si alguien tiene interés en traducirlos.

En el blog de Alice Friedemann, una periodista independiente especializada en energía, titulado Energy Skeptic (www.energyskeptic.com) se publica un artículo titulado “Tilting at Windmills, Spain’s disastrous attempt to replace fossil fuels with Solar Photovoltaics”,

Tilting at Windmills, Spain’s disastrous attempt to replace fossil fuels with Solar PV, Part 1

donde se hace un repaso exhaustivo del libro que publicamos Charles Hall y yo.

Alice asistió a unas conferencias sobre energía en la universidad de Stanford en EE. UU. Uno de los temas tratados fue la conveniencia y necesidad de estandarizar los procedimientos y metodología para medir la Tasa de Retorno Energético (TRE o en inglés Energy Return on Investment o EROI). A juicio de Alice, los elementos que se supone deberían estudiarse como costes energéticos de la fabricación, puesta en marcha y operación de los sistemas energéticos no quedaban claros. Así que preguntó al panel si no habían pensado en algunos de ellos que habían tenido en consideración Prieto y Hall. Les dejo con el propio comentario de Alice sobre aquellas jornadas:

April 1, 2015 update: Criticism of Prieto and Hall
I was at a net energy conference at Stanford University the past two days. The hoped for outcome is a new net energy think-tank that would standardize net energy by having a specific way researchers must conduct their studies, which LCA or other data tables are most-up-to-date and should be used, what assumptions they must state, and so on. If researchers strayed from this format or added additional material, they’d need to say why.
The reason this needs to be done is because policy makers don’t take EROI studies seriously. Nor should they since they’re too easy to game by proponents (i.e. not counting the energy to make steel because it is 100% recycled, cherry-picking the best performing wind or solar farms over the best performing time period, etc). Policy makers can’t be expected to make policy decisions or recommendations when EROI studies of a renewable ranges from 4 to 115.
Meta-studies can’t be done either because there is too much missing data, and/or unstated assumptions, and/or different models used, and rarely is real data available, since private companies don’t have to, and don’t want to reveal their true performance, operation, and maintenance costs or they’d get less investment and lower stock prices.
Yet even at the conference several EROI papers were not clear about their boundaries. Long after the artificial photosynthesis presentation it came up that the outside boundary was set at 300 feet outside the factory gate. Earlier they said the best guess EROI was 1.66, clearly if storage of the hydrogen produced, and delivery to the customer were added, the EROI is probably negative. The researcher implied that trying to combine the hydrogen with CO2 to make liquid fuels would be negative at this stage. There may be a good reason why the boundary is 300 feet away, probably they assume that there’s a refinery nearby using the hydrogen to upgrade heavy or tarsand oil.
By the end of the conference I was a bit frustrated at the lack of discussion of boundaries.
This has been the main problem for 40 years and one of the big reasons why studies come up with such different results.
So I asked the panel what they thought should be done about the boundary issue. For example, ethanol studies using narrow boundaries found higher EROI values than those with the widest boundaries, which often found a negative EROI. Then I said that if there’s to be a discussion of how to set boundaries, I recommended Spain’s PV revolution by Prieto and Hall which used real production data over several years rather than models as a good way to decide what to include or not include, and why, because I thought the boundaries should be as wide as possible. Also, since what you’re proposing is a mostly electric world, does that mean new standards will include the electricity used to make cement for the windmill and roads it travels on, the electricity to make the steel and fiberglass, and the electricity to make electric mining trucks and the electric delivery trucks that deliver the windmill? And what would that electric delivery truck look like anyhow?
I had the strong impression this was not a welcome question. No one leaped to answer, and finally one of the panelists said that the boundaries ought to be wide but that this question was best talked about over a glass of wine.
After this session one of the speakers, Marco Raugei, at Oxford Brookes University, came over. He was very upset by my question because he thought Prieto and Hall’s book was awful. He told me it was so bad that several scientists had tried to prevent Springer from printing it.
I told Raugei that I had looked very hard for any criticism of the book but had not been able to find any rebuttals, so what exactly was wrong with it? Raugei replied that the book wasn’t peer-reviewed. So I asked why someone didn’t write a paper to refute the book, and he said that since it wasn’t peer-reviewed, why bother, but I pointed out that Farrell in 2006 had used non peer-reviewed papers in his famous ethanol EROI study. I don’t know if their book not being peer-reviewed is a valid criticism or not, does anyone know?
When I asked Raugei to tell me more about what was wrong, he said that it was inconsistent in so many ways, not defensible the way economic inputs were converted from money to energy such as the insurance figures, some air travel expenses, too haphazard, inconsistent in method and goal, not clear enough in stating that this is just one snapshot moment in time in Spain and that it used an ill-advised subsidy scheme, that the EROI is not the same in other countries and parts of the world, and that the goals should have been more explicitly explained.
What goals? I assume he thinks they try to come up with low EROI figures, which is outrageous, they have no special interests in pushing the result up or down.
If anything, Prieto ought to be skewing results towards a high solar PV EROI since he built some of the solar plants he writes about in the book. He could make more money by touting solar PV rather than by criticizing it. Hall certainly has no dog in this fight. In fact, if there were a way to have outsiders with no financial interest do EROI studies I’d be all for it, because parties with a financial interest tend to skew the results, such as the National Corn Growers Association funded scientists, who found the highest EROI results in their non-peer-reviewed papers.
I know there has been a firestorm of criticism of this book, but it’s all within private email, and the only one I have been privy to said that a better LCA database should have been used.
EROI is the only rational way to look at energy contraptions and to reach the right conclusions about what should be done. I don’t have high hopes that a standardized way of doing EROI will be done.
It was ironic that Steven Chu was the opening keynote speaker at this net energy conference, since Patzek once wrote me that “Steven Chu decided not to fund my Laboratory Directed Research and Development (at Lawrence Berkeley Laboratory) project whose goal it would have been to arrive at a consistent thermodynamic description of all major energy capture schemes bio and fossil, so that we compare apples with apples. What I did not appreciate is that no one wants to know that they may be working on a senseless project, such as industrial hydrogen from algae. I despair seeing the rapid corruption and sovietization of American science (without the Soviet strengths in basic sciences), but can do little about it. … It is not easy to get funded on the subjects I have proposed. …In fact, my LDRD proposal to develop the comprehensive thermodynamic language to talk about the different energy resources was just not funded…”
Someday when a future history of science author attempts to write about the history of EROI, I hope that Patzek, Hall, and others have written memoirs that discuss how hard it was to get funding, get published (did scientists really try to prevent Spain’s solar revolution from being published?!), the criticism they received, and so on, because I think it will be of great interest to the grandchildren and further generations down the line. Understanding why renewables have such low EROI might prevent cargo-cult like behavior to spend huge amounts of resources and time to build them after the dark age that may ensue at some point on the downslope of Hubbert’s curve.

A raíz de esto y por alusiones, decidí contestar en el propio blog de Alice y en el foro de Energy Resources, adonde había saltado el debate, de la siguiente forma:

Pedro Prieto’s 4/11/15 response to criticism of his book:

Alice, as promised, let’s start answering and commenting on some of your wise comments.
The first thing is to confirm that no EROI studies can be taken seriously if the range of results varies so wildly. So it is quite a sensible approach to try to reconcile the different studies and methodologies.
Having said that, the prevailing methodology is what fails, specifically in the case of Solar PV analyses, but also in others. Experts in solar PV will have more and more available data as time passes from global installations.
Until now, we had seen many studies on different solar PV technologies with different typologies and topologies. Even before our book “ Spain’s Photovoltaic Revolution. The Energy Return on Investment” (Prieto & Hall. Springer 2013) appeared, there were already many variances and divergences.
Even works of Fthenakis or Raugei have contemplated significant variances in the EROI results over time and with different studies of solar plants.
But they all had a methodology in common: they generally used, as you have correctly pointed out, the best material recovery, the best theoretical solar PV system in each case, the best irradiated areas, the assumption that systems will operate in full along the lifetime with no problems. In summary, a methodology that has helped or served as documentary support or reference to many to reach global conclusions on the long term ability of modern renewables to replace, take over or substitute fossil fuels, from a given particular plant analysis extrapolated massively. That was the case, for instance, of Mark Jacobson and Mark Delucci in their studies on how modern renewables could replace fossils and supply the present global consumption. This is a traditional bottom-up approach.
After my experiences of several years in the field with different technologies, typologies, topologies, latitudes and state of development countries and confronting with the real world results, Charles Hall and myself, after having had a pint of beer in an Irish Pub in Cork commenting these issues, in the ASPO International Conference held there in 2007, decided to embark in a study on solar PV. But we tried to do it in a radically different form. It took us several years of back and forth, discussions, checks and double checks, consulting with other experts and so on.
The study, as many of you may already know, was on a real world installed plant in the best irradiated country in Europe (Spain), with the official and very accurate energy production records of the Ministry of Industry (read by telemetry to more than 40,000 digital sealed meters in each of the respective individual plants) over a period of three complete years (2009-2011). That was the main innovation: a top-down analysis and the huge scope of the solar PV plants working in the real world, rather than theoretical academic bottom-up approaches.
With more than 140 GW of installed plants worldwide, and several complete yearly cycles of operation of many of them, it is going to be increasingly difficult for some authors to continue with the academic approach, to verify real behavior of the EROI.
Now, about the energy input boundaries.
Of course, if we focus only on the energy inputs of the solar modules and their composition (glass, aluminum frame, connection box, copper or silver soldering, doping materials, silicon, ingots, wafers, cells, etc.) and perhaps inverters or metallic structures orienting and tilting the arrays, then we may come with spectacular results in a very good irradiated area with the theoretical module yield. This is what has been generally considered in most of the studies carried out to date and what is proposed by some authors as the recommended methodology.
But this is just one of the factors we looked into when we decided to analyze the energy inputs of a complete solar PV system, not just what appears in the marketing pictures of the solar plants.
After many years working in the field, one can appreciate the number of activities that are indispensable (sine qua non conditions), for a solar PV plant to work and operate as some of the authors of several EROI/LCA/EPBT studies consider they are going to work.
We differentiate some 24 factors and additional analysis that was not absolutely complete nor exhaustive, but proven and existing. None of these factors had been considered or hardly appeared in but few of the analyses made by the most renowned solar PV EROI authors. Your study of our book already identifies some of them and I have mentioned them on many occasions.
One of the factors, a7 (the energy input required for modules, inverters, trackers (if any) and metallic infrastructures, labor excluded), was precisely the EROI as usually calculated by many authors. We decided not to judge the different results of this universe of conclusions but to accept a sensible average of the range of many publications that gave us an EROI in itself for this concept of 8:1; that is, for 25 years of lifespan an Energy Pay Back Time (EPBT) of 3.1 years. Or an energy input cost equivalent to 0.125 of the total generation along the lifespan of the system.
But then we started to consider the rest of the factors (boundaries or extended energy input boundaries) and discovered that conventional EROI studies were ignoring 2/3 of energy inputs indispensable to get the solar PV plants in operation.
The list calculated the energy inputs, based on the experience of several plants in Spain and extrapolating to the 4 GW installed power studied in the book, to road accesses to the plants, foundations, canalizations, perimeter fences, evacuation lines, rights of way, O&M module washing or cleaning self consumption, security and surveillance, transportation — sometimes as far as from China, premature phase-out or un-amortized manufacturing and other equipment, insurances, fairs exhibitions, promotions or conferences (like the one you had in Stanford –to whom to attribute the involved energy expenses?), administration expenses, municipality taxes, duties and levies, cost of land rent or ownership, circumstantial labor (notary publics, public officers, civil servants, etc.) agent representative or market agent, equipment stealing or vandalism, communications, remote control and plant management, pre-inscription, inscription and registration bonds and fees as required by the authorities, electrical networks and power lines restructuring ass a consequence of the newly injected 4 GW in a national network with about 100 GW, in unexpected and not previously planned nodes of the grid, faulty modules, inverters or trackers, associated costs to the injection of intermittent loads: network stabilization associated costs (only referred to combined cycle gas fired plants, well known costs).
Some of these factors may certainly have diminished with time. Many others, have certainly increased over time. Taxes, for instance, have raised sharply. Stealing in Spain, for instance, is not relevant, but in many countries of the world it is a problem.
We mentioned and developed a little of the associated energy costs of the injection of intermittent loads, by pump up or other massive electric energy storage systems, because we knew it was going to be fundamental and relevant and did not want to open any more the old wounds in an already meager EROI. These costs are still today in a fierce debate in Spain and in many other countries, but they are certainly relevant, should the modern renewables have to replace the present fossil fueled global societal functions.
As you can see, the BOUNDARIES are of essence to determine the real life EROI, rather than an academic EROI. No one critical of our book, could say, to the best of my knowledge, that any of these briefly listed factors was not a real one and was not needed to have (at least in Spain) a solar PV system up and running along its lifetime. But for some strange reason they had never considered them.
Once they recognized the facts of real life, then this battlefield was rapidly abandoned and shifted to the “comparison” with other energy sources, namely the fossil fuel sources. Some authors were claiming that if fossil fuels were treated with these ‘extended’ energy input boundaries and factors, their EROIs should obviously go down in a similar proportion.
What they did, then, was to use a multiplying factor on the order of 3 for solar PV, arguing that it has a logic, when comparing equivalent systems and using an equivalent methodology. I fully disagree and I have shown in several occasions the reason why:
The world uses (mostly burns) about 13 BToe/year of primary energy or more than 510 EJ/year.
Of that, approximately 170 EJ of fossil + nuclear go to produce an equivalent of 40 EJ of clean and useful electricity, this making the point of Raugei valid to some extent, if the solar PV systems would entirely go to replace electricity produced by fossil fuels, because of the losses of about 2/3 of the primary energy in the conversion process.
But the world is not behaving in this way, as scientists like Raugei and Fthenakis must know.New renewables just enter into the energy equation to simply provide more energy to the global system.
Above all, the most important flaw in this assumption is that the world also consumes about 285 EJ in non-electrical uses, like aviation, civil works, mining, transportation, merchant fleets, armies or agriculture (eating fossil fuels, Dale Allen Pfeiffer). And it happens that if we would pretend to use electricity from renewables to replace the fossil fuels used for these global activities, likely through an energy carrier like the eternal hydrogen promise, the pretended multiplication factor used by Carbajales et. al, would immediately operate in the reverse form and become a division factor, probably in the order of 3, with respect to the direct use of fossil fuels of today. That is why we did not employ this “correction factor” used by Carbajales et al.
I will not enter into this debate further, because I find it futile. I do not care if when treating the EROI of coal, oil or gas with these extended boundaries may go down 2/3 from already published studies, now ranging with the old methodologies, for instance, from 100 to 12:1 for oil, depending on the period and places, or 60 to 20:1 or coal or gas in similar levels.
Taking down these 2/3 of present EROI studies will not change the fact that this society is now moving itself with fossils in an 80%. And makes it possible to move it. This is the final proof. And an important part of the rest (excluding perhaps a part of biomass in underdeveloped countries) is also being produced because the energy subsidies given by fossil fuels to the other sources, like nuclear, or hydro, that we could not have dreamt of having them, if a well endowed fossil fueled society and its related machinery and technology wouldn’t have been available. Nuclear, hydro, solar PV, solar thermal or wind energies are underpinned (or absolutely underpinned) by a fossil fueled society, not the vice versa. The global society has been making its growing economic, industrial and technological life basically without those energy sources. But we could not imagine these sources working and feeding themselves in all the complex value chain, and besides giving an important net energy surplus to the global society. Not now, neither in a foreseeable horizon.
That is, we can not ignore this crucial fact: biomass helped initially to coal to develop, but 60 years from the first massive use of coal, this fossil fuel had already passed biomass in volume and versatility of use and became quite independent of biomass.
This happened circa 1900, at the level of 800 MToe/year of global primary energy consumption and with about 1.6 billion inhabitants.
Then came oil, much more dense and versatile than coal. It took oil again about 60-70 years to pass coal and biomass as the main global energy source. This happened circa 1960, but then, in a consumption level of 3,000 MToe/year and with 3 billion people on Earth.
Now, we move in the level of 13,000 Mtoe/year of global primary energy consumption and with about 7.2 billion people. But gas or nuclear have not passed oil as the prime energy source. And we have to wonder why, if they were discovered and tried to be used massively more than 60 years ago.
Quite the contrary, we are moving fast, because of peak oil, back to the possibility of coal surpassing oil again in a decade or so, as the main energy contributor, but this time, probably at a lower global consumption level and probably with a world population still growing in numbers and in poverty.
The first two big energy transitions (biomass to coal and coal to oil) were made with the surpassed energy source still growing and helping to initially boost the coming one, but soon proved to be quite self sufficient to feed a growing and demanding global society, well after paying for their own energy inputs in the exploration, mining or drilling, extraction, transporting, refining and distributions processes WITHOUT ANY DOUBT, because nobody will doubt the evolution of the last century and the role of the fossil fuels on it. Now, we have to face the third big energy transition, in the highest level of energy consumption and population and with the main energy fuel, oil, in depletion.
Of course, one has to accept that in this complex world, all energy sources are somehow interrelated, but, as Orwell said in The Animal Farm, ‘all animals are equal, but some animals are more equal than others’. This is exactly what is happening with the energy sources and its properties and qualities: they can all be measured in EJ or in TWh or whatever, but some are more equal than others. Meaning that there is an obvious ASYMMETRIC interdependence of energy sources, being in the last century, the fossil fuels (and oil in a very first place), the ones responsible for our present global status.
To me, then, there is a non sequitur to shift the EROI battlefield to try to extend the boundaries in the fossil fuel EROI studies, to lower them and favor renewables by comparison, because whatever the EROI and the boundaries considered, it is obvious that the present global society spending 13 BToe/year of primary energy (80% of them from fossils), has been able in the last century (we shall see for how long) to pay their own energy expenses, and BESIDES putting a huge net energy surplus at the disposal of 7.2 billion humans and keep growing in a spectacular form for more than a century.
For instance, when the IAE mentions in their WEOs the costs of ‘subsidies’ to different energy sources, it always calculates much bigger subsidies for fossil fuels than for the modern renewables. It is a sort of energy fallacy, from my point of view.
If the global society has resources to subsidize anything, it is because it has previously gotten a surplus of resources from somewhere. And this ‘somewhere’ is obviously a global society that has created them using mainly fossil fuels at discretion. I can ‘subsidize’ my son to go to the cinema, but I cannot ‘subsidize’ myself from the salaryI earn by myself and saved in my left pocket, by changing it to my right pocket.
I understand that some fossil fueled activities may certainly be ‘subsidized’ in certain forms. For instance, kerosene for aviation in the airports, which is tax exempted in many countries, when compared with gasoline. Or ‘subsidized’ coal prices paid to depleted coal basins in Spain to continue producing low quality brown coal, to keep the social peace in the region and avoid the miners revolting. But it is a fallacy to conclude that ‘somebody’ is ‘subsidizing’ fossil fuels globally speaking, when fossil fuels are 80% of our global activities creating surplus. From a strict energy point of view, fossil fuels are subsidizing basically the whole present world activities. Period.
What in reality the OECD watchdog does is a mystifying operation. When digging up the IEA figures of ‘subsidies’ of fossil fuels, one discovers that they are really talking about ‘prices’ or ‘price levels’ of fuel in the producing countries that are selling them domestically at prices lower than those the IEA drawn line would wish they had, to leave more ground to the big OECD importers to buy this fuel from producers at prices OECD can afford.
Coming back to the energy input expenses in extended boundaries, we also left out the financial costs, despite knowing that they were quite large and generally also a sine qua non factor. Most of the plants have been financed in an 80% of the total turnkey projects at about 10 years term, with interest, that ranged from 2% to 5% per year. I firmly believe that finance is a form of using a pre-stored available resource (in a fossil fueled society, coming from fossil fuel related activities) to erect or put in place and operate a given system. In that case, an energy system. So, when one asks for credit or leasing and has to pay back with this resource the principal and the interest to the bank, in let’s say a 10 year term, this is energy evaporating into the system through the bank.
Labor energy input costs were also left aside, even we had a very good set of data from industry in Spain, classified by categories, skills and full time and part time employees in the sector. The reason was that some of our factors may have had already included part of this labor in, to avoid some limited duplicities.
If we had included these financial (even just the additional money created and having to pay back in the form of interests by the requested credits or leasing) and labor energy input cost, the solar PV EROI would have probably plummeted to <1:1.
In fact, it is very surprising how they criticize the methodology we used to evaluate the financial data (which they did not question basically in numbers), by stating that the conversion of monetary into energy units is not adequate and do not conform to conventional input-output methodologies. Our methodology is clear in these conversion units and reflects a quite direct relation between GDP and total primary energy spent in Spain or between active labor and energy spent per laborer or any given and specific related industrial activity or service rendered. This despite we mentioned that Spain hasn’t publish, for years, any input-output tables for the economy (Carpintero, Oscar).
However, it seems remarkable how some are incapable of detecting any anomaly in describing EPBT’s of solar systems recovering the energy spent in them in a question of few months for a life time of 30 years (EROI’s of 40:1 !!) and the astounding divorce with the economic reality, of a world or promoters that look for about 10 years economic recovery, this including heavy premium tariffs (Germany, Spain, Italy, now UK or France) or tax holidays or exemption (US and others) or economic recoveries that last more than the expected life time, if no economic incentives are given.
Without these incentives, the rest of the world is a renewables wasteland. Promoters are virtually not investing (with few exceptions in volume worldwide) in modern renewables, if there are no such incentives. The 140 GW world installed base so certifies, with about 70% of the global installed base made in developed countries with incentive schemes and some 25% made by emerging countries, like China or India (now Brazil or South Africa in a much lesser amounts), also with strong political incentives to cope world markets, leaving a meager 5% for the rest of the world. Doesn’t this crude reality shows anything in their conversion of monetary units to energy units methodologies, to the ones giving EPBTs of few months and financial recoveries of many years?
So, I am not surprised, Alice, that some experts, having in their records tens of papers published with high solar PV EROI results, would have shown some annoyance at your question on our book. I would humbly ask from here that when somebody mentions that we work with some methodological ‘inconsistencies’, -a term to which they are so fond of to disqualify other disturbing views- they should rather look into the above explanations and facts of the real world.
I have kept silent until now on what I consider a very regrettable behavior now made public by Raugei, as per your comments. It is true that they dared to write our publisher asking him to stop publishing the book when it was in a draft version in a sort of censorship I had not seen since several centuries in medieval Spain. The recommendation came after somebody took the draft from our publisher without our consent some time before the release and they tried to stop the publication, even threatening that they would discredit it, as they have been doing since it was published, if it were published. I have never seen such a type of behavior, even less in the academic instances.
The reason they gave first is that we missed our final EROI (2-3:1 being quite conservative and I reaffirm myself more and more as years are passing) by an order of 3. That was precisely the Raugei view on the penalty to be imposed on fossil fuels, if a clean electricity source could replace every kWh of fossil fuel origin, considering that in conventional fossil fuel (or nuclear plants for the case) we need about 3 units of primary energy to get out 1 unit of electric energy. We tried to clarify this in some posts, but unsuccessfully.
Fortunately, the publisher did not consider this a direct threat and the book was finally published.
As for the Raugei comment that the book was ‘awful’ because it had not been ‘peer reviewed’, he qualifies himself. Just look at the acknowledgements of the book. Two professors in Physics from different universities did review the book and produce sensible comments. Charles Hall, the coauthor, is an institution in EROI, that is here questioned with superficial comments. Besides, I understand that publishing a book is a free decision, that does not necessarily require peer revisions, yet despite that, we did have our work reviewed. Perhaps what Raugei wanted to say is that the peer review was not made by the usual reviewers in an endogamis game.
I have been observing that in the academic world, things are getting unfortunately tougher. Some of the technical papers have sometimes more pages of references than pages of content (see more of my comments on the article below). In the case of solar PV systems, and the references in published papers, it seems there is an excess of ‘selfies’ which were a fashion in the academic papers, much before than with the smart phones and the sticks. And secondly, it appears that credits are gained or given by the number of references that a given person is quoted and this has started a race for a sort of endogamic cross-quotations, that gives all the reason to Tadeusz Patzek, when he talks about the ‘Sovietization’ of the American science. Perhaps what disturbed Raugei about our book is that we also skipped somehow from these habits and did not leave to the usual teams a review that, with all probability, would have ended in the basket.
Of course, Raugei is right when he presumes that our case is perhaps valid for Spain and for the 4 GW installed within the period 2009-2011. Because should we had considered Germany and its public production of solar PV systems within the same period, the Energy Return in terms of MWh per MWp installed would have been less than half of those of Spain.
I am now retired and happily growing my organic farm. Not now or since 2001, when I left working for a telecom corporation, have I had any interest in discrediting or crediting solar PV systems. I am not making my life by publishing papers and trying to gain credibility on a given subject. If anything, I should have defended, as you very well stated, the solar PV systems, because I own 50 kW within a 1 MW plant that I manage and I have helped to design, develop and done some consulting (including what we call here ‘permisología’ (an intricate paperwork to get all permits and licenses to the the solar PV plants) of more than 30 MW that are working with different technologies, typologies, and topologies in different latitudes in Spain. I have also cooperated with projects in some Latin American and African countries and I have worked as director of Development of Alternative Energies for a listed Spanish company for a couple of years within the period.

Just a final nota bene, with additional comments on the paper Energy return on investment (EROI) of solar PV: an attempt at reconciliation. Michael Carbajales-Dale, Marco Raugei, Vasilis Fthenakis, Charles Banhart Journal of Latex Class Files. Volume 11 No. 4 December 2012
http://www.researchgate.net/publication/271699871_Energy_return_on_investment_%28EROI%29_of_solar_PV_an_attempt_at_reconciliation
The title of this paper, is a supposed attempt to reconcile different views on solar PV EROI, but I have never been informed by the authors of it, even though I have the dubious honor of being cited several times in it.

I did not know that I had formed a so called “Prieto group in Madrid ”, in second place, after Fthenakis group in Brookhaven and before Weissbach group in Berlin or Brandt group in Stanford.
Also surprising is that the document is dated in December 2012 and our book was not published until the spring of 2013. Even more surprising, that the book is mentioned several times, to be criticized, but it does not appear as such (Prieto & Hall. Spain’s Photovoltaic Revolution. The energy Return on Investment”. Springer, 2013) in the bulky references, that occupy almost as much space as the article in itself. It appears, however, as some uncertain (P. Prieto and C. Hall, “Eroi of spain ’s solar electricity system,” 2012). This does not seem to be a very edifying example in referencing others.
Then, the paper comments that “an average energy payback time (EPBT) of 3 years and lifetime of 25 years are used to calculate the EROI subscript PE-eq = 8.33 value for this part of the system. No references are given for any other input data; though it appears that anecdotal worst cases of installations were generalized by the authors”.
Well, a brief look to the a7 factor (page 78) of Energy derived from Conventional Life Cycle Analysis Studies and Calculated as an Inverse Factor of EPBT”, comes out with an EROI of 8:1 for the energy content in modules, inverters, trackers and metallic infrastructure, quotes some works of Fthenakis, Alsema and Kim among others not cited, not to make too boring the EROI publications ranging around 8:1 in their conclusions and with these parameters analyzed (without extended energy input boundaries). Some more could be found in many places. In fact, these levels of EROI for solar PV were quite common in the early years of 21st century. See, for instance, Bankier and Gale in its Energy Payback of Roof Mounted Photovoltaic Cells. Energy Bulletin. June 16. 2006, where they come out with a number of EROI’s ranging from EPBT’s from 1 year (EROI 25:1) to 25 years (EROI = 1:1)
http://energybulletin.dev.postcarbon.org/node/17219

Bankier & Gale EROIs

As can be seen from the above, we were far from using as an EROI for modules+inverters, plus metallic infrastructure in a sort of anecdotal worst cases of installations generalized by the authors. On the contrary, we were more in the low estimate in years (high estimate EROI), than using worst cases.
Now, for the record, it should also be very convenient for all the prolific authors on solar PV EROI to revise the figures given in papers published several years ago, to double check how are they performing (Energy return statistics). We are very anxious and expectant to learn how it has gone with, for instance, the hybrid PV/Thermal promising analysis, or even better, the results, years after publication, of the Fresnel lenses combined with high efficiency cells in concentration mode.
I recall specifically in this respect the V.M. Fthenakis and H.C. Kim paper, titled “Life Cycle Assessment of High-Concentration PV Systems”, in which they analyzed The estimated EPBT of the Amonix 7700 PV high concentration system with Fresnel lenses in operation at Phoenix , AZ, and found 0.9 yrs for its EPBT. I wonder if they could still support this analysis, just five years after their study and how the promising system has contributed to the grid parity worldwide, considering they recovered the energy spent on it in less than one year.
Scientific authors should be more careful when accusing to others of using ‘anecdotal worst cases’, specially for the expected Energy Return along a life time, when they are probably using ‘anecdotal best cases’, instead of going on to real life 3 years cycle proven and official statistics of production for 4 GW installed park.
Talking about the life time (directly involving the Energy Return), it is very interesting to see how some papers have changed the estimated life time of solar PV Systems from 25 years to 30 years. It is curious that virtually all manufacturers give a maximum of 25 years of power guarantee of their modules (with the corresponding degradation process over the years) and 5 years of material guarantee (the later superseding or prevailing on the former in case of failure) and we find scientists happily granting 30 years for the EROI studies. In my opinion this is a clear attempt to produce higher EROI’s and lower EPBT’s with no rational grounds.
The fact that the Carbajales et al paper ends recommending “that the conventions outlined by the EIA PV Systems Program Task 12 (Environmental, Health and Safety) be followed in conducting EROI calculations, considering that the IEA methodology has easily swallowed the 30 years life time for solar PV modules, gives us a very clear clue of what is going on with these recommendations.
In our discussions on this topic a couple of years ago, an editor came to say that if our factors were really sine qua non (indispensable) for the system to be up and running and the IEA methodology did not considered them, perhaps it was the moment to change the IEA methodology.
I would just recommend the IEA tour Spain (it is not the worst country in solar PV systems; on the contrary, it is one of the most efficient in terms of MWh produced per Mw installed). The IEA should come and check and double check how many solar PV plants have not lasted, for a variety of reasons, the 25 year life time of the manufacturers or the 30 years of the IEA backed by some scientists. Just in 2015 alone about 40 MW have been dismantled, with a lifetime averaging about 5 years. Trials are the delight of reputable and expensive law firms, which earn quite a lot of money preparing lawsuits against promoters, manufacturers, banks and the government. That is real life, far beyond the academic instances. I am following now a demand of a promoter that has decided to buy 2/7 of the modules he originally bought for his 500 kW plant, because the manufacturer (not Chinese), he originally bought from 6 years ago, has disappeared, as have most of the European manufacturers in the last 5 years.One wonders what is the value of a technical guarantee on power, if the life time of the manufacturers becomes much shorter than the one of the power of the promised modules. This is, of course, ‘anecdotal’, although not for the interests of the affected promoters.
Conclusion:
After a couple of years from the publication, I have much more data to reaffirm for myself that we were really conservative in our 2.4:1 EROI for many different reasons and factors. But I will not publish more data. I will go back now to my organic garden and wish you all the best for what I suspect may be a grim future.
I’m a pessimist because of intelligence, but an optimist because of will. Antonio Gramsci.
Pedro in Madrid, without any group.

A raíz de esto, surgieron más comentarios de diversos participantes en el debate como sigue:

Ted Trainer, un profesor de Ciencias Sociales de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Australia, autor, entre otros trabajos de “The Simpler Way” (el camino más sencillo) dijo:

Ted Trainer, author of “Renewable Energy Cannot Sustain a Consumer Society” and many other great books detailing what needs to be done, wrote this thoughtful response to what I wrote about the net energy conference:
Thanks Alice for your valuable comments on the EROI of P/v issue. Yes it is very disappointing that so much confusion and acrimony surrounds this crucial issue, and that they seem not to be moving to a resolution as quickly as they should be. There are of course big interests at stake, with the conventional high EROI assumption suiting the industry, and the theorists who have previously put out such claims. At the very least Prieto and Hall should be commended for getting the whole messy issue of boundaries and components, and appropriate energy cost assumptions for the various components, on the agenda. Sadly the disputation over this issue illustrates the way scientists are not immune from prejudiced and nasty behaviour, (a considerable amount of which my efforts to analyse renewables has evoked.) As Alice notes, when large scale research funding is at stake there can be strong incentive for competitors to reinforce perspectives that suit them.
As I see it the goal should not be a single EROI figure for PV, because much depends on the situation and conditions. We need values for, for instance modules operating at the average site in Spain with its level of radiation and losses, and we need figures for the various components in the system, such as energy used to produce modules in the factory, energy used to produce the factory, energy lost in inversion, in typical inefficiency due to dust, poor alignment…, and in transmission… , energy embodied in inverter replacement, energy used to get workers to the factory, energy used for O and M at the solar farm, energy “retrieved” when the modules are recycled … A fairly thorough provision of these elements would enable anyone to work out the EROI for a particular plant at a particular location, and most importantly the EROI assuming a given set of boundary assumptions. Graham Palmer has just begun a PhD at Melbourne U intended to sort all this out
I strongly object to Raugei’s comments to you re peer review. I have little respect for the entire peer review edifice, due to my unsatisfactory experience in trying to get critical analyses published. Very often I have found the comments of reviewers to range between nit picky imposition of the way they would have expressed things or gone about the job, through reasoning that I see as at least challengeable and at times dead wrong, to rejection on utterly idiotic grounds … such as being told that my recent c 20 page detailed critique of the 2014 IPCC report on renewables was “not scientific”, after waiting seven months for review. (That phrase constituted the full case given for rejection.) On another occasion, where it took over a year to get through the difficulties, I was presented with a seven page essay disagreeing with elements in my case. If that reviewer wanted to express a different view he should have done it somewhere else, not try to insist that I say what he would have said. I have another case where possibly a c 50 word review from probably the most prestigious individual in the field said the paper was good, but the paper was rejected because a second even shorter review was unfavourable. The reasons were so unintelligible that I had to ask what they meant. It eventuated that the editor said he didn’t think it was the kind of paper his journal published … after I had waited seven months.
I see the process as far too prone to the whims, prejudices and in fact arrogance of reviewers and editors. They should get out of the way and let people say what they have found or think, and focus only on things like pointing out mistakes or pointing to overlooked evidence or assumptions, or logical errors. Their role should be to help get ideas and analyses out to others, and to block only as a last resort. Too often I have found that reviewers think their role is to make authors conform to their preferred style and they assume the right to condemn work that doesn’t proceed as they would have. I have written reviews in which I say I think the argument is wrong and the procedure not satisfactory but I think the paper should be published, because I could be mistaken and the paper does present a case that it is important for us to think about.
Ultimately what matters is not whether some guru approves of your analysis, what matters is whether the case is sound/convincing/persuasive/well supported, and that judgment should be up to readers, and the quality of the work should be established over time as others in the field comment on it. My main concern here is what must be the large amount of time and good work that doesn’t get published because of the whims of some guru. I would assume that most of us have had papers rejected by one set of reviewers but regarded highly by those from another journal.
So I see any attempt to block publication of controversial, and even flimsy/challengeable cases, on grounds to do with “peer review” as very annoying. I have no interest in whether or not it was peer reviewed; what matters is whether or not the case it argues is sound, or valuable, or ought to be heard. (Theses that are dead wrong can turn out to be valuable contributions, by helping subsequent discussion to clarify an issue.)Whether or not it was peer reviewed has nothing to do with whether or not it is correct, or a valuable contribution, and, Alice, should certainly not be regarded as “a valid criticism” .
In my view Raugei raises some important problems, such as the effect on the Pietro and Hall conclusions had by the Spanish subsidy system, but it’s appropriate to now sort these, not to regard them as reasons why the gook should be rejected. The most important issue he raises is in claiming that the energy input to PV production should be reduced to one-third, on he grounds that it is electricity and PV produces electricity. As I see it this simply depends on whether the electricity used to produce the modules is coming from PV (or wind or CSP) generating systems … and at present it isn’t. In a world where all electricity came from PV farms it would make sense to put the value of the electricity input into the denominator of an EROI, but in the presenter world the energy going into production is (mostly) coal.
Endnote: This book was only available online at the University of California. It’s a shame libraries are putting many journals and books into electronic versions only. Especially this book. Microchips, motherboards, and computers will be among the first casualties of declining fossil fuels, because they have the most complex supply chains with many single points of failure, dependence on rare metals, and so on (see Peak Resources and the Preservation of Knowledge for details). I encourage you to get your (university) library to buy a hard copy of this book, so that future scientists and historians will understand why our society didn’t replace fossil fuels with “renewables” even though we knew oil couldn’t last forever.
On an energy form, Prieto recently wrote (March 2014): “Since we wrote the book, I have been able to experience a few more incidental factors: mice delightfully gnawing the cables and covers and optical fiber communication color cables, and storks excreting on modules with about 6 inches size -one cell- per excretion. Real life has many factors that they are not accounted in organized studies in labs, universities with particular technologies and plants in perfect irradiation places.”
References
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Nikiforuk,Andrew. 1 May 2013. Solar Dreams, Spanish Realities. TheTyee.ca
Parnell, John. 22 July 2013. Spain’s government accused of killing solar market. PVtech.
Parnell, John. 23 July 2013. Spanish government facing court action over cuts to solar support. PVTech.
Raugei M., et al., “The energy return on energy investment (EROI) of photovoltaics: Methodology and comparisons with fossil fuel life cycles.” Energy Policy (2012), published on line doi:10.1016/j.enpol.2012.03.00897. See more at: http://www.todaysengineer.org/2013/Jun/book-review.asp#sthash.YsRjuI9R.dpuf
Prieto & Hall, 15 Apr 2011. How Much Net Energy does Spain’s solar PV program deliver? A Case Study. State University of New York 3rd Biophysical Economics Conference. Data sources for Energy Generated and Energy Invested slide 10, How monetary costs were converted to energy units. Slide 12, How the embodied energy costs and boundaries were determined Slides 17, and much more.
Soble, J. March 3, 2015. Japan’s Growth in Solar Power Falters as Utilities Balk. New York Times.
Spanish solar energy: A model for the future? Phys.org

El debate entonces se trasladó al foro Energy Resources, donde Alice hizo comentarios sobre el mismo y Marco Raugei, también por alusiones escribió el pasado 13 de abril de 2015:

I find it rather unfortunate that my personal comments to Ms. Friedemann about the book by Prieto and Hall were misconstrued as stemming from the frustration at a failed attempt at “medieval censorship”.
To try and clarify once again:
the main issue with Prieto and Hall’s book, apart from the somewhat crude nature of their money-to-energy conversions, is that their analysis was promoted and advertised as reporting on “the true EROI of PV” (largely understood as that of the technology itself, to be then liberally compared to that of “oil” or “coal” as alternative energy sources),
instead of something like “the societal EROI of PV in Spain, in the specific circumstances dictated by the incentives and deployment schemes in place that country in 2009-11, and including all the documented (yet often in principle avoidable) system-level inefficiencies, as well as a host of monetary inputs used to indirectly support the PV industry in its early stages of expansion, etc. etc.”.
As to Mr. Prieto’s response of 11 April, I have no problem in conceding that there is some truth in many of the points he makes.
However, the main issue there is, again, that of a loose definition of goal and scope.
In fact, by reading through his long post, it appears that Mr. Prieto’s ultimate interest lies not in comparing PVs to e.g. coal- or oil-fired electricity production systems, but instead in comparing the ability of PV to completely replace fossil fuels by single-handedly supporting all of society’s energy demands.
I personally wonder whether it is even reasonable to frame the problem in these terms – but even if one were to accept this as the starting point for one’s analysis, the fact remains that one would then have to be extremely cautious in the way the latter is carried out and advertised, in order to:
(i) avoid a somewhat random (and hence yes, inconsistent) cherry-picking of the energy inputs, and, even more importantly,
(ii) prevent the subsequent inadvertent (or even worse, intentional) extrapolation of the results to a different context from the one for which they were intended.

El 14 de abril de 2015, Charles Hall también intervino brevemente y publicó a través de Alice el siguiente texto en Energy Resources:

Charles Hall says:

April 13, 2015

There are many things I could say, but mostly hooray to Alice for bringing this up again in her marvelous fashion! And to Pedro for his exhaustive replies, many of which show how conservative our initial assessments were. Of course our analyses were for one country at one time. OK lets see such an empirical study done elsewhere and with boundaries that include ALL the necessary inputs. The reader should know that both Weissbach and Graham Palmer have published studies that are comprehensive and give results similar to ours.
One thing I find amazing is that no one mentions the sensitivity analysis Pedro and I did in chapter 7. This covers the special effects of the Spanish situation, weighting electricity vs fossil energy, removing financial services from the assessment or considering an energy assessment of labor. None of them, other than the obvious effect of multiplying the electrical output by three or including the energy to support labor’s paycheck, made any very large difference in the EROI. There are other sensitivity analyses here and there in the book. Why in the world do people criticize us for things we had already examined and published the effect of? Did they read the book?
The boundaries issue remains critical and I for one will not believe any EROI that does not have something like as thorough as we have attempted in our book. All that we do is enormously subsidized by fossil fuels, and we need to understand that better. I hope that we will someday have abetter estimate of the energy cost of indirect costs, business expenses, roads etc. but leaving them out completely is, in my opinion, a greater error than using a value that has uncertainty, especially when that uncertainty is examined. In the 1970s we had some fair idea of the energy costs of all kinds of goods and services in society due to the wonderful work of Bullard, Hannon and Herendeen using detailed I-O tables and good government data, with uncertainty analysis. Services were quite energy intensive, although not as much per dollar as most goods. Now there are no such analyses and government energy use data sources degrade year by year. So we used and corrected these old values and compared and corrected them against what we could come up with for these issues today. All explained in the book.
Most of the uncertainties in EROI are greatly reduced when goals and boundaries are consistent, when an explicit methodology is used (e.g. Murphy et al. 2011, Order from Chaos, a preliminary protocol…in Sustainability) and when real data, not cherry picked lab data, is used. I look forward to better science in the future, but the failure of the Stanford meeting to answer Alice’s spot on question, and the ascendency of neoclassic economics vs using as hard real science as we can bring to bear, does not leave me with too much hope.

De aquí, un lector trasladó este debate a otro foro especializado en energía (peakoildiscussion), donde Ron Swenson, Director del International Institute of Sustainable Transportation y de una decena de empresas y entidades más relacionadas con la energía solar y miembro de ASPO USA, hizo el siguiente aporte el 17 de abril de 2015:

I’m afraid this remains a narrowly framed discussion. If you want to moan and groan about solar EROI, then you might consider at least one more piece of the puzzle…

Because it can’t be replaced, the EROI of oil is eventually going to be <<1 of course. (It won't pay energetically to pump it out of the ground or squeeze it out of tar sands.) Our children's children will have to bring it up from below using old prairie windmills I suppose.

In the meantime while it still flows out of the ground, the EROI for oil is not all that pretty either, because there's more to it than just extraction. Here for example is an illustration from one of Charlie Hall's publications:

20150419 Ron Figure 1

Once the oil becomes «Consumer Ready Fuel» then this is what happens (per RMI)

20150419 Ron figure 2-

13% of 20.5% above = 2.7%.

Then take note that the 13% efficient engine is moving mostly metal. If several humans in a car constitute even 10% of the vehicle’s mass, then the oil-based transportation system is 2.7% * 10% = 0.27% efficient carrying people (the real point, after all).

No, mine is not a complete analysis either, but it serves to point out that the solar folks aren’t the only ones whose analysis is incomplete.

As Pedro and Charlie know, I didn’t object to the book being published, but I did find errors in an early draft that had subsequently been corrected. I also experienced blatant censorship of my own work when I found dramatic errors in the EROI analysis of a solar system by our common hero Howard Odum 10+ years ago when he was still amongst us. It goes both ways.

We have a long way to go. Getting funding for resolving these crucial questions is the key. Using economics (an instrument of policy, not a science) is where humanity is really off the mark. (Any lousy technology can be gamed for a while but then the chickens come home to roost.)

How about if we take a good hard look at this as a community and find common ground for a better conversation … and work as a community to find resources? (We peaksters are not _that_ pathetic!)

Pitting solar against oil against cold fusion is not the point. The point is to establish common terminology, identify boundaries (as suggested) and include the complete life cycle, plus factor in the plight of our children’s children. Climate change comes to mind for some of us. What’s the EROI of oil and coal if the result is inundated coastal cities? How much energy from whatever source will it take to pump the oceans out of human settlements?

Best regards,

Ron Swenson

Antonio Turiel, suficientemente conocido en este blog, contestó a Ron Swenson el mismo día de la siguiente forma:

Interesting remarks, Ron. My feeling is that the situation regarding the EROEI of oil is even more convoluted.

For instance, looking at the first figure, we see several industrial activities (extraction, refining, transportation…) where part of the energy of oil is «wasted», but I think that the picture is more complicated than that. That «wasted energy» is in fact used for feeding the own industrial process in some sense, this generates some (typically well-paid) jobs and estimulates activity (that is what energy is useful for). My point is that a part of that «wasted energy» is in fact used in the more complex Human ecosystem which goes beyond the final consumer. Maybe the final consumer just gets 20% of oil energy, but a significant part of the other 80% keeps the wheel spinning (for instance, some «waste heat» at refineries is used for other chemical processes that provides us useful chemicals and plastics). So a clear definition of «wasted energy» is in order.

Regarding the second figure, there is also some subtleties here. We tend to oversimplify the discussion on energy because going into the details is very complicated. From the perspective of the end user, it is irrelevant the amount of energy that s/he is provided but the useful energy (or even rather, the «usefulness») s/he can get from it. A person who drives a car doesn’t want to know how many megajoules of fuel have been loaded into, but how many miles s/he can drive. It is irrelevant if a quite large part of the energy is wasted as far as the deal makes sense for the driver (i.e., the amount paid per mile). And thus, at the end, the question is what we want the energy for, in the first place. Energy is just a mean, not a goal on itself. Any process in which energy is employed has its inefficiencies, but this is already somehow implicit and embedded in our calculations. It doesn’t really make a lot of sense, for instance, to compare the efficency of an electric car in terms of how it uses the energy once loaded into if we dismiss all the losses of the process of charging the battery, including the embedded energy in all the parts of the car. My feeling is that, yes, most likely just a small fraction of the original energy goes into doing «useful work» (exergy, if you like) for any process you dare to think about, but the losses are always there and are going to be always the biggest part because that’s the way Nature works. All the discussion about «wasted energy» recalls me the discussions more than a decade ago about the «waste DNA» that constitutes 99% of our genome; it finally came out that that «waste DNA» was in fact important.

Another important point is that EROEI calculations are static, that is, they assume a stationary society. This is no longer the case. We can well be wasting previous stored energy (in the form of key assets and infrastructures that we are no longer maintaining, and thus they are lending us their embedded energy until they finally break up) just to keep oil being pumped/extracted/synthetised from the most inefficient sources. This use of our previous «energy savings» may lead us to the wrong impression that everything is fine and that the EROEI is ok. We need rather a definition of dynamic EROEI, which in particular would help us to identify energy sinks that are actually draining our immobilized «energy savings».

So, if we want to clarify the situation from an academic perspective I feel that probably those three issues should be analyzed. From my personal point of view all that is however quite irrelevant, because as we keep on discussing about those challenging, technical issues, real-life first-hand experience shows us that something is going deeply wrong in our society and that the long promised energy saviors are never arriving. Maybe we should rather be preparing ourselves for the next hit.

Regards,
Antonio

Ese mismo día también intervino el profesor Ugo Bardi, titular del Departamento de Ciencias de la Tierra y miembro de ASPO Italia, de la siguiente guisa:

Calculations are never perfectly right. Sometimes, they can be perfectly wrong but, normally, they are useful if you know their limits. But they are not useful when they are used to bolster one’s ideological prejudices.

On this point, I am always amazed by the true hatred that some people have against renewables and photovoltaic in particular. Just yesterday I had a taste of this on the «peak oil» group on facebook. (https://www.facebook.com/photo.php?fbid=379559368743674&set=gm.10150667093274858&type=1&theater)

As Ron correctly points out, «we peaksters are not that pathetic». And we should not be. I understand that some people took the idea of «peak oil» as meaning that we will all return to the stone age. So much that they WANT to return to the stone age and react emotionally to any hint that we might, after all, mitigate the decline, at least a bit. It is the exactly opposite attitude to that of those who cover their ears with their hands when they hear the fateful «peak» term and then run away singing «la-la-la» to themselves.

Well, I guess it is the way humans are.

U

Sam Carmalt, presidente de SW Consulting SA en la Universidad de Yale y consultor energético, comentó en el mismo medio y día:

Two points:
1) I find the EROEI concept extremely useful. But whether it can be used quantitatively at the precision needed to make investment or policy decisions is more of an open question. At present such decisions are made primarily by considering the monetary return on investment — which has its own major problems with subsidies, taxation and so forth. If the economy is indeed powered by energy (note particularly the economic publications by Georgescu-Roegen, Beinhocker, and Charlie Hall in collaboration with Kent Klitgaard in this regard) then in theory it seems to me that the two ROIs should align. And I might note that parliaments cannot repeal fundamental economic laws, although they often try.
2) Attempting to suppress any thoughtfully presented and rationally supported position is not the way to move forward. This is especially important to remember when the position is not the consensus view. I recall that Lord Kelvin opposed Darwin’s theory of evolution; similarly, it took an Australian medical doctor years to get his theory that stomach ulcers are caused by bacteria rather than gastric secretions past the peer review objections that simply reflected accepted belief.
Regards,
Sam

También consideré necesario volver a responder a Ron Swenson (en el pasado debatimos esto con intensidad y frecuencia, al parecer con las divergencias todavía vigentes) de la siguiente forma y en el mismo medio:

I will start agreeing with Ron that EROI of fossil fuels will finally go to <<1:1. This gives also ground to Antonio comments that EROI is a dynamic (and very complex today) process. Although it was not so dynamic when we were in the stage of hunter gatherers for the two previous million years.

However, much before we reach <>1:1 in ground 1 level of pears to pears comparison, without any deep study. And if in this common level or ground 1, modern renewables appear to have much less EROI than fossil fuels and result, after more than 60 or even 100 years of having been invented, are still totally underpinned in the fossil fuels society, then Houston, we have a problem.

And now, let’s go to ground zero if, for instance, we want to introduce climate change and try to calculate the equivalent energy input expenses of this certainly extended boundary into the equation (or energy needed for corrections that climate change will require thereof, if they can be solved by pouring more energy into the system). In this case, probably by now, you all may have reached to the conclusion that it probably the experiment of the last 150 years of growth based on fossil fuels and that our grand grandparents was not worth the effort and that we should have rather given up extracting what it should have been always left underground.

And from here, to the obvious conclusion: should we had no reached to this level of technological advances, social benefits and present worldwide infrastructures, heavy machinery fleets, etc. and with them the level of complexity, all of them thanks to the abundance and versatility of fossil fuels, we could not even dream of having modern solar or wind systems (or also nuclear, for the case) up and running.

I cannot imagine gallium arsenide vaporization chambers, micrometric filters, mining of the variety of sophisticated materials required in modern renewables (copper, indium, titanium, neodymium, praseodymium, aluminum, tempered glass, special saws to cut ingots in micrometer slices, doping systems, modern transport, packaging, pick ups for maintenance, etc., without this society that is obviously changing the climate. What a paradox, isn’t it?

Of course, I encourage Ron or everybody to continue searching and finding energy resources to keep this 150 years game or illusion going on for some more decades, but trying to avoid, as much as it is possible to fool oneself playing solitaire and comparing pears with pears, as much as it is possible in this complex society, working in the same ground levels when analyzing or compare different energy systems.

In my case, after many years of this search, I have concluded that fossil fuels were a poisoned gift and I could not find in all these years any other energy source with the same abundance, versatility and availability, until now (of course it will end and sooner than many expect). So, my obsessions to continue the way we were, have finished.

I now am trying to rewind in my memory and learn from my grandmother way of living and her energy habits in a village, with a very good and sustainable use of solar and wind energy. Warming herself in the sunny days of winter by sitting with her neighbors looking south, protected from the cold winds of the north by the sun dried brick’s wall while either weaving, sewing, mending, patching or embroidering, or in winter in the patio in the shadow, with a small well and the walls and floor full of flowerpots and fruit trees. Using wind to dry the washed cloths; animal dung to fertilize the farm and very little wood to cook the delicious and simple meals. Reducing its mobility to a much less than one kilometer in 99% of the movements and so forth. It was not romantic; it was very tough and hard living; but it was way more sustainable than what we have today. And over all, she had the dignity in her humility that I miss today in many people living in our arrogant modern cities with a lot of material comfort and enjoying absurd mobilities as if there were no tomorrow.

Bests.

Pedro

Ron Swenson volvió a contestar de la siguiente forma el mismo día:

Pedro,

Thanks for your kind words in respect to your grandmother and your thoughtful comments.

________________________________________
On 4/17/15 2:45 AM, Pedro Prieto wrote:

> I have concluded that fossil fuels were a poisoned gift
Well put. FWIW, in Swedish, the word gift actually means poison. (It also means married… that’s another, longer story.)

We are yet to discern the true meaning of these words. In that light, I’m having a little trouble with your comment:

> I could not find in all these years any other energy source with the same abundance, versatility and availability
«Abundance, versatility and availability» come with a price if it doesn’t happen to be «abundant» or «available» underfoot but must instead be [essentially] stolen [sold at a price far below its intrinsic value] from other parts of the world:
20150419 Ron figure 3 text 2

I wonder if there is a connection between that «red ink» and this red ink:

«The Great Recession in Spain began in 2008 during the world financial crisis of 2007–08. In 2012 it made Spain a late participant in the European sovereign debt crisis when the country was unable to bailout its financial sector and had to apply for a €100 billion rescue package provided by the European Stability Mechanism (ESM)….»

http://en.wikipedia.org/wiki/2008%E2%80%9314_Spanish_financial_crisis

The game keeps rolling along because the incumbents (those who control the deal flow) can always extract a percentage from the flow and then pass on their costs to an evermore impoverished constituency.

Is this abundance or debt bondage? I’m reminded of a song from my youth, Tennessee Ernie Ford singing a coal miner’s lament, «I owe my soul to the company store.»http://en.wikipedia.org/wiki/Sixteen_Tons

Ron

PS: Spain is not the exception. My own native USA is by far the more egregious player in this drama.

Gerry Agnew, escribió en Energy Resources el 16 de abril de 2017


That is some article Alice!

So, two questions if I may-

1) With solar power proven to be just about everything it was NOT supposed to be, can we say that the abandonment of DESERTEC a couple of years ago shows that even with an environment which has to be about as favourable as possible (the Sahara), solar couldn’t make a go of it? Remarkable! Is there any environment were it CAN work, or is it a terrible financial gaffe which is going to see write-downs/write-offs on an immense scale?

2) So, without generous subsidies, is solar a mirage – it can never work? Are solar companies a terrific short sell in other words (to bring this back to something I am quite familiar with)?

Have you done any work with wind power? Is this a similar boondoggle?

Gerry

A lo que Alice contestó:

Gerry,

The EROI of solar PV is probably negative, at best very low, wind isn’t great either. Although I think EROI is the only way to rationally analyze what contraptions might work or not, that is best left to the experts in the field.

Another way of looking at wind and solar is that they simply add to the blaze of the age of oil but won’t outlive it because they don’t produce enough energy to reproduce themselves AND have extra energy to keep civilization going.

It’s easier to understand why they’re useless when you consider that FREIGHT transportation depends on oil. There is nothing in your house you paid for that didn’t get there on a truck, and most likely on a ship as well. If we can’t electrify trucks, and the lifespan of highways is about 20 years, electricity won’t matter. Rail can be electrified, but the tracks go very few places. In America, Canada, Mexico this isn’t likely to happen – one electric locomotive equals about 2200 PHEV cars, so charging up 25,000 locomotives is a like charging 55,000,000 autos (if battery operated), or if overhead catenary you’d need about 250 new power plants. Our existing locomotives are often over 400,000 pounds, the railcars over 300,000 pounds, and so a LOT of power is needed. Europe has much lighter trains and equipment.

Even if we could electrify – diesel engines can last 40 years – we won’t have the TIME or energy to replace trillions of dollars of equipment AND build an electric distribution system.

On top of that, it isn’t clear that we can balance over 50% intermittent electricity (or even over 33%) without energy storage which is not possible to the extent needed, or a national grid – that’s not going to happen, and that takes decades as well.

I don’t see a solution, but even if I were a techno-optimist I don’t see any way around hard times because it would take decades to build something else with less and less fossil fuel — my guess is that people would rather eat than build windmills with the remaining petroleum.

Alice

También, Vasilis Fthenakis, profesor de la Universidad de Stanford, puso su comentario en Energy Resources a través de Alice como sigue:

I don’t have the time to go over the details of the editorial above so I will limit my response to three basic items:

1. My name (Vasilis Fthenakis) was cited above as having published estimates or EPBT and EROEI based on models, not actual data and that my estimates include only modules, not the rest of the system. Alice, you got it completely wrong; if you bother to look at my peer-reviewed journal articles (and Yes I believe in peer-review) you will see that my estimates (also consensus estimates from IEA PVPS Task 12 comprising LCA analysts from 12 countries and 2 industry associations) are all based on actual process data; data that originate in 13 different manufacturing facilities in the EU and the US and were cross-referenced and verified exhaustibly.

2. It is true that we describe, quantitatively in great detail, the best actual systems of which there are min-to-min and hourly performance data over many years and we don’t bother with the worst. We do this because only the best survive, and yesterday’s best is proven to be today’s average. All the ground-mount utility PV systems in the US that were constructed since 2010 and are being operated accordingly. The fact that the system prices for c-Si and CdTe PV fixed tilt and 1-axis tracking have gone down a factor of 3 since the timing of Pietro’s experiences is a clear indication of the continuing evolution taking place which we have been accurately described and quantified.

3. I also thought that presenting Pietro’s book as a book describing the global PV reality was a disservice and for the two years before the publication of the book I tried to engage the authors asking for their data which they were not providing. And yes I complained to the publisher about this lack of scrutiny to literarily promoting one’s view as the view for the world and hinder the growth of solar. Vasilis Fthenakis, PhD, senior chemical engineer (with tenure) Brookhaven National Laboratory and professor of earth and environmental engineering, Columbia University author or co-author of 300 articles and 4 books on topics at the interface of energy and the environment (email: vmf@…)

I want to add to the 1st item above that our estimates of EPBT (and by extension EROEI) are based on energy and material burdens in the life-cycle of the modules, mounting structures, inverters, transformers, cables, thus of the whole system till the high-voltage feed into the substation. All based on actual-process data. To the reader: if you have the time and the interest please read our publications; some of them have been cited 300 times in journal articles of others -they must be credible cheers, Vasilis Fthenakis


El atracón de deuda basura de los perforadores de esquistos para mantenerse en la rueda sinfín

Por su interés público, traducimos al castellano y colocamos en nuestra web esta noticia de Bloomberg, una compañía estadounidense que fundó el anterior alcalde de la ciudad de Nueva York, con ayudas varias, entre otros de Salomon Brothers y un 20% de inversión de Merryl Lynch. Bloomberg ofrece software financiero para análisis y plataformas de comercio de capital, servicio de datos y noticias para las empresas financieras y organizaciones en todo el mundo, datos y noticias. Tiene una tercera parte del mercado, similar a Thomson Reuters. Es decir, alguien nada sospechoso de ser un apocalíptico o un pesimista inveterado. El artículo va firmado por Asjylin Loder el pasado 30 de abril de 2014
http://www.bloomberg.com/news/2014-04-30/shale-drillers-feast-on-junk-debt-to-say-on-treadmill.html
y lo consideramos importante para tratar de entender la locura de las inversiones en el gas y el petróleo de esquistos

Rice Energy Inc. (RICE), es un productor de gas natural que tiene créditos con alto riesgo, a pesar de lo cual consiguió 900 millones de dólares en tan solo tres días de abril, unos 150 millones más de los que andaba buscando.

No está mal para la primera emisión de bonos de la compañía con base en Canonsburg, Pennsylvania, después de salir a bolsa en enero. Especialmente puesto que lleva tres años seguidos perdiendo dinero, que ha perforado menos de 50 pozos –la mayoría de los cuales han recibido nombres de superhéroes y camiones monstruosos- y que dijo que gastará 4,09 $ por cada dólar que gane en 2014.

El impulse estadounidense en busca de la independencia energética, se está respaldando en préstamos calificados como basura, que han sido tan iportantes como los logros tecnológicos que permitieron el festival de perforaciones. Mientras el mercado de deuda de altos rendimientos se ha duplicado en tamaño desde finales de 2004, la cantidad de bonos emitida por las compañías de exploración y producción (de esquistos) se ha multiplicado por nueve, según Barclays Plc. Esto es lo que está permitiendo mantenerse a la revolución de los esquistos, incluso aunque las compañías gasten el dinero más rápidamente que lo ingresan

“Los inversores están bebiendo cantidades industriales de refrescos llenos de burbujas” , dijo Tim Gramatovich, quien ayuda a gestionar fondos por más de 800 millones de dólares como director jefe de inversiones de Peritus Asset Management LLC, compañía radicada en Santa Barbara. “Los inversores pierden la disciplina. Dejan de hacer cálculos. Se olvidan de la contabilidad. Están soñando sueños y eso es lo que está sucediendo con el auge de los esquistos”

Shale Driller

La producción total de petróleo de los EE. UU. llegará a su cenit en 2019 con 9,61 millones de barriles (diarios), según el escenario de referencia de la Energy Information Administration. Esta agencia incluye el petróleo ligero de roca compacta y el de esquistos .

Activos de calidad

Rice Energy pudo obtener financiación tan fácilmente por la calidad de sus activos, que se encuentran en algunas de las mejores áreas de Marcellus, una formación de esquistos en el subsuelo de Pennsylvania occidental y el el oeste de Virginia y por el éxito de esta compañía perforadora en estos lugares, dijo Gray Lisenby, que es el director financiero de Rice. La demanda fue de hecho tan elevada que a principios de este mes, Rice paró una gira de campaña por cuatro ciudades para incentivar a los prestamistas. El interés de los inversores, después de las tres primeras ciudades sobrepasó las expectativas, dijo Lisenby.

Las empresas que tienen una deuda elevada respecto de sus ingresos, utilizan bonos basura para conseguir efectivo. Los inversores consiguen mayores ingresos por la mayor probabilidad de que no lleguen a devolverles lo prestado. Este tipo de deuda está demandado porque la Reserva Federal ha mantenido sus tasas de interés prácticamente a cero durante más de cinco años, lo que ha hundido los ingresos de inversiones más seguras. La popularidad ha forzado a la baja los costes de inversión en las compañías que tratan de extraer el petróleo y el gas natural atrapado en capas de rocas muy profundas como las de los esquistos de Bakken en Dakota del Norte o el Eagle Ford en Texas.

La oferta de bonos de Rice Energy de este mes, ha ssido calificada como CCC+ por Standard & Poor’s, unos siete niveles por debajo de inversiones de calidad o un nivel por encima de lo que algunos inversores institucionales, tales como fondos de pensiones o compañías de seguros están autorizadas a comprar. Standard & Poor’s dice que la deuda calificada como CCC es “actualmente vulnerable al impago” y en condiciones adversas, los bonos con esa calificación probablemente no serán pagados de vuelta. Aún así, Rice Energy pudo conseguir créditos al 6,25% Esto se compara con el 9,5% de otros bonos con calificaciones similares, según el índice Merryl Lynch del Bank of America.

Shale Platform

Mejores clasificaciones

Algunas compañías han podido realizar sus actividades de perforación con créditos mejor calificados. El pasado diciembre, Continental Resources, Inc (CLR) con sede en Oklahoma, que es la compañía perforadora más activa de la cuenca de Bakken, vio su calificación mejorada de bono basura a Baa3, en el margen inferior del nivel adecuado de inversiones, según Moody’s Investors Service. Otros como Chesapeake Energy Corp (CHP) han hecho cambios para mejorar su posición frente a las compañías de valoración de activos. Chesapeake, con sede en la ciudad de Oklahoma, ha vendido 16.000 millones de dólares en activos en los últimos dos años, ha reducido sus gastos y refinanciado la deuda y S&P ha dicho que está considerando elevar la calificación de la compañía.

Acuerdos sobre la deuda

Por otro lado los últimos contratiempos de Forest Oil Corp. (FST)’s muestran cómo puede salir el tiro por la culata a la estrategia de pedir prestado continuamente para seguir perforando. Forest vendió 1.300 millones de dólares en activos en 2013 para seguir perforando. Después, en febrero, esta compañía productora de petróleo y gas, con sede en Denver, anunció resultados decepcionantes de sus acciones en Eagle Ford. Forest no consiguió nuevas entradas de dinero suficientes para mantenerse a flote de sus deudas. Tanto S&P como Moody’s redujeron sus perspectivas de crédito a negativas.

Los bonos de Forest se hundieron. Sus 577,9 millones de dólares de espectaculares notas al 7,25 con vencimiento en 2019, se cambiaron en el mercado a 88 céntimos de dólar el 22 de abril, según Trace, el sistema de información de precios de bonos de la Autoridad Reguladora de la Industria Financiera; una caída desde el tope de 98,4 céntimos de dólar del 24 de febrero. Larry Busnardo, director de relaciones con los inversores de Forest Oil no respondió a las llamadas pidiendo sus comentarios.

“Se trata de un negocio de cubito de hielo derritiéndose”, dijo Mike Kelly, un analista energético de Global Hunter Securities en Houston. “Si tu producción no crece, estás acabado”

Deuda barata

De las 97 compañías de exploración y producción que valora S&P, 75 están por debajo del nivel razonable para conceder créditos. El rendimiento promedio de las compañías energéticas de exploración y producción, valoradas como basura, ha caído al 5,4% del 8,1% a finales de 2009, comparado con una caída del 5,21% desde el 9,06% para todas las compañías valoradas por debajo del nivel aconsejable de inversión, según Barclays.

La deuda barata, junto con los avances en perforación horizontal y fracturación hidráulica o fracking, han impulsado la producciónb de petróleo estadounnidense hasta niveles no vistos hace 26 años. El año pasado, el país produjo el 87% de su propia energía, colocándose en niveles de independencia de fuentes externas, como no lo había estado desde 1985, según la Energy Information Administration.
Es un auge caro. Este año se gastarán unos 156.000 millones de dólares en exploración y producción en los EE. UU., según un informe de diciembre de los analistas de Barclays dirigido por James West. Es un 8,5% más que el año pasado y sobrepasa las previsiones de que los crecimientos de gastos generales creciesen un 6,1%, dijeron los analistas.

La rueda sinfín del gasto

“¿Quién podrá o querrá financiar la perforación de millones de hectáreas y cietnos de miles de pozos en continua pérdida?” escribió el mes pasado Ivan Sandrea, un investigador asociado del Oxford Institute for Energy Studies de Inglaterra, en un informe. “La benevolencia de los mercados de capitales estadounidenses no puede durar eternamente”.
El gasto no acaba nunca, dijo Virendra Chauhan, analista de Energy Aspects en Londres. Dado que la producción de los pozos de esquistos decae de forma muy acusada ya en el primer año, los productores están obligados a seguir perforando cada vez más para mantener la producción. Esto significa tener que vender los propios activos y seguir pidiendo más dinero.

“Todo el auge del esquisto es realmente una rueda sinfín de gasto de capital y de deuda”, dijo Chauhan.
El acceso al mercado de bonos de alto rendimiento ha permitido a los perforadores de esquistos gastar más dinero que el que recuperan. Las compañías catalogadas como basura (junk) de exploración y producción gastaron el año pasado 2,11 dólares por cada dólar que obtuvieron, según un análisis de Barclays de 37 firmas.
Capitán Planeta

Rice Energy consumirá por encima de su flujo de caja en 2015, según Moody’s. Rice dice que piensa invertir 1.230 millones de dólares este año en construir ductos, comprar terrenos y perforar en la zona de Marcellus, donde la empresa ya tiene pozos con nombres tales como Hulk, Capitán Planeta y Mojo, así como en la cercana formación de Utica en Ohio. Su primer pozo en Utica falló, lo que supuso una pérdida de 8,1 millones de dólares el año pasado, según los datos de la empresa. Su segundo intento está en curso.

Los analistas accionariales dicen que les gusta el potencial de crecimiento de Rice. Sterne, Agee & Leach Inc, una agencia de corredores ubicada en Birmingham, Alabama, valoró a la firma como “compra” en febrero, poco después de la oferta pública de acciones inicial. Howard Weil, una división del banco Nova Scotia con base en Toronto, dijo que las acciones de Rice serían mejores que otras en la misma línea de negocio. Las acciones han subido un 38% desde la oferta pública de acciones inicial.

“Las compañías de exploración y producción que tienen pozos en “puntos dulces” son capaces de elevar su deuda porque disponen de un valor de respaldo significativo y no se ven como de alto riesgo por parte de los inversores”, dijo en un correo electrónico Lisenby el director financiero de Rice.

“La calidad de los activos y el éxito de las operaciones suponen ingresos y creación de valor de cara a la deuda y a los tenedores de acciones”, dijo. “Los inversores son bastante agudos a la hora de reconocer esto en las empresas y a recompensar las que tienen esta cualidades”.

Con todo, el banco central estadounidense ha mantenido las tasas de interés cercanas a cero desde diciembre de 2008. Un aumento de las mismas, como se espera para 2015, podría hacer que los inversores salieran de ahí en busca de inversiones más seguras.

“Es un perfecto ardid para que los inversores pierdan mucho dinero”, dijo Gramatovich. “El modelo es insostenible”


First Solar busca crecer reemplazando a las plantas gigantes en desiertos

Para aportar algún indicio más de que no es oro todo lo que reluce en el desarrollo fotovoltaico y que hay claves escondidas en los costes energéticos, copio un reciente artículo de Bloomberg sobre una de las grandes esperanzas mundiales en los prometedores desarrollos de sistemas solares fotovoltaicos y líder mundial indiscutible de la tecnología llamada de película delgada (thin film), que hace un quinquenio, prometía que iba a desbancar a los módulos poli y monocristalinos. Se trata de First Solar. El artículo, que traduzco aquí para comodidad de los lectores en castellano, no tiene desperdicio y lo comento entre líneas y en cursiva para precisar mejor

http://www.bloomberg.com/news/2014-03-18/first-solar-seeking-growth-to-replace-giant-desert-plants.html

Por Christopher Martin 18 de marzo de 2014

El mayor productor de módulos solares de EE. UU. está fijando una estrategia para aumentar sus ventas, al disminuir sus ventas en grandes proyectos sobre el suelo en los desiertos del suroeste estadounidense.
Muy bien, eso de fijar una estrategia para aumentar las ventas, al disminuir las ventas. Es muy original.
FirstSolar obtiene alrededor del 65% de sus ingresos de vender grandes plantas solares a las empresas eléctricas, un mercado que está cayendo una vez que sus mejores clientes ya han comprado toda la energía limpia que necesitan. El fabricante se encuentra perdido en el reciente auge de las instalaciones solares sobre cubierta, que están aumentando desde que Solar City Corp (SCTY), respaldada por el multimillonario Elon Musk ayudó a popularizar la forma de financiar instalaciones caseras.

Así que el genio de First Solar cae ahora en la cuenta de que el negocio de la venta de grandes plantas fotovoltaicas sobre suelo para conexión a la red, cesta en la que había colocado todos sus huevos, ha dejado de ser negocio, porque los pedidos nuevos se dirigen más hacia pequeñas instalaciones sobre cubiertas de edificios, generalmente particulares y que otra empresa que produce módulos policristalinos se ha hecho con este mercado. Veamos cuánto y de qué forma, si nos lo permite este artículo eminentemente financiero, más que técnico.
Otro aspecto muy curioso de esta noticia es el que dice que las empresas eléctricas estadounidenses “ya han comprado toda la energía eléctrica limpia que necesitan”. ¿Cuánta es esa energía? La noticia lo oculta pudorosamente, pero veremos más adelante los ridículos objetivos que ya han cumplido. También observamos algo contradictorio: para ser una tecnología tan barata y tan deseable ¿cómo es que las grandes empresas eléctricas dejan de comprarla cuando cubren sus pequeñísimas obligaciones de cuota de producción verde?

El cambio de grandes proyectos solares a los más pequeños deja a los analistas preocupados por que First Solar pueda quedarse atrasada cuando la industria se recupere después de dos años de desplome que dejó en la bancarrota a docenas de competidores. El director Ejecutivo Jim Hughes está promocionando más ventas en el exterior y el año pasado compró una empresa que atenderá el mercado de instalaciones sobre cubierta en Japón.

Vemos ahora que la industria lleva dos años desplomada y apenas nos habíamos dado cuenta, en medio de tanta alabanza al crecimiento infinito de estos sistemas. ¿Cómo puede suceder esto, justo cuando estamos tan teóricamente cerca de la paridad de red y los precios de los módulos han caído varios órdenes de magnitud respecto de hace ocho o diez años?
“Vemos a FirstSolar muy mal posicionada y sin posibilidades en la creciente demanda de instalaciones sobre cubierta”, escribió en una nota Brian Lee, un analista de Goldman Sacjs (GS) Group Inc.. “Esperamos en EE. UU. y en los próximos años un crecimiento en la demanda de instalaciones sobre cubierta que desbanquen a los grandes proyectos sobre suelo”
Hughes hablará mañana a los analistas e inversores en Nueva York. FirstSolar ganó un 1,8% hasta los 57,76$ al cierre de Nueva York. Las acciones se han más que duplicado el año pasado, por debajo de las de SolarCity que se han más que cuadruplicado

Demanda Solar

Las empresas eléctricas han comprado proyectos solares porque están obligadas, no porque sean los más económicos. Veintinueve Estados tienen estándares de instalación de renovables que les obligan a ciertos porcentajes de enegía de fuentes limpias.

Muchas de estas empresas ya exceden las exigencias estatales de energía limpia. Este es el caso de California, el mayor mercado solar de los EE. UU. y el destino de aproximadamente un 55% de las ventas de los proyectos de FirstSolar desde mediados de 2012. Las tres mayores instalaciones ya han adquirido cerca del 20% de su potencia de fuentes renovables y han identificado proyectos para cumplir con sus objetivos del 33% para 2020, según un informe del mes pasado del regulador eléctrico californiano.

Es decir, que resulta que en los avanzados EE. UU. la obligación a las grandes empresas productoras de electricidad de instalar las prometedoras energías verdes, ya en paridad de red, son apenas un 33% de la electricidad para el 2020, un nivel prácticamente igual que el de la Unión Europea (20/20/20), incluyendo la eólica, que según los expertos, incluso está más cerca de la ansiada paridad de red.

Las empresas de Arizona, el segundo mayor mercado y de Nuevo México también han alcanzado los niveles exigidos. Texas, el octavo mayor mercado tiene 10.000 MW de parques eólicos funcionando, casi el doble que los objetivos de energía renovable para 2015, lo que ofrece pocas oportunidades para ventas adicionales de energía solar.

¡Ah, la gran Texas, cuya generación y demanda está en el orden de magnitud ella sola como la de España y resulta que con 10 GW de parques eólicos se da por muy satisfecha por haber doblado los objetivos de energía renovable, cuando España está supuestamente insatisfecha con más del doble de capacidad eólica y desde luego solar. ¿Por qué no ofrecen estos datos en contexto? ¿Adónde va el mundo renovable con estos objetivos? ¿Qué se esconde detrás de estas ridículas cifras de instalaciones renovables, si en verdad fuesen tan baratas y tan competitivas?

Proyectos en camino

FirstSolar está instalando 3,7 GW de proyectos en los EE. UU. incluyendo los 550 MW de la granja solar Topaz. Se espera que esté acabada este año y suministrará energía a 160.000 hogares, una de las dos mayores plantas de esta empresa. Todos esos proyectos tienen que acabarse en los próximos 3 años, según su informe anual de 2013.

La preocupación es que los mejores años de ventas de FirstSolar pertenecen al pasado cuando sus plantas recibieron más de 3.000 millones de créditos garantizados gubernamentales.

Otro interesante dato. Al parecer, también en EE. UU. cuecen habas subvencionadotas y estos señores de First Solar y sus clientes, se habían merendado más de 3.000 millones de dólares en créditos gubernamentales garantizados. Falta algún datos más sobre el total instalado, para que sepamos cuánto es el “primaje” por MWp instalado, pero también aquí parece que si no hay incentivos, todavía a la altura de 2014, no se instala ni un panel.

“Los proyectos verdaderamente grandes como el de Topaz no se volverán a repetir”, dijo Rob Stone, un analista de Cowen ¬ Co de Boston, que tiene una valoración bursátil equivalente a la de FirstSolar. “Ya no hay más créditos garantizados como los que financiaron los primeros proyectos. Los terrenos cercanos a las líneas de transmisión ya han sido ocupadas o están fuera de los límites y puede llevar años aprobarlas”

Otro detallito más para añadir. Así que ya no hay más dinerito garantizado para plantas solares grandes, que son las que presentan mayores y mejores rendimientos por MW instalado, como se puede apreciar claramente por la comparación odiosa entre España y Alemania, que han seguido políticas de instalación diferentes y ahora Alemania está casi en la mitad de MWh por MW instalado que España. Y encima, aquí se apunta que en EE. UU. ahora van hacia el modelo alemán. Pues que bien, pues muy buena idea, oiga. Además, también empiezan a sacar la patita de los costes no declarados. Resulta que en un país tan grande y con tanto desierto tan bien irradiado, los terrenos cercanos a las líneas de transmisión a las que conectarse (a bajo coste, añado) ya han sido tomados y los que están más accesibles, tienen que instalar costosas líneas de transmisión que además llevaría años aprobarlas. Díganme quien había calculado en las TRE de la fotovoltaica estos costes y les diré como hacían las cuentas de la vieja. Aquí ya damos por sentado que la red eléctrica existente, construida por una sociedad eminentemente movida con energía fósil, barata y abundante, va a estar ahí siempre y que no tiene coste energético alguno. Sólo tiene uno que engancharse, como los marginales de los grandes barrios, y a generar. Así da gusto hacer cálculos sobre eficiencias.

Los módulos de película delgada de FirstSolar utilizan una tecnología diferente que es más pesada y menos eficiente que los módulos que dominan la industria, basados en tecnología policristalina. Esto les coloca mal para las instalaciones sobre cubiertas, en las que el espacio es escaso. Es parte de los motivos por los que la compañía se había centrado en vender grandes proyectos sobre suelo a las empresas eléctricas.

Más leña al fuego fotovoltaico. ¿Dónde estan todos aquellos fuegos artificiales sobre las bondades de la baratura de los módulos de película delgada? Ahora resulta que son más pesados y menos eficientes que los módulos convencionales y por tanto una porquería para las instalaciones sobre cubierta. Y siguen sin pedir disculpas por tanto engaño.

La vision de Hughes

Hughes espera que todo el sector industrial solar estadounidense siga expandiéndose. Esto incluye tanto los grandes proyectos de FirstSolar como los sistemas sobre cubierta que generalmente no utilizan módulos de FirstSolar.

¿En qué quedamos, señor Hughes? ¿Se van a seguir “expandiendo” o van a abandonar el sector de las grandes “utilities” que ya no les van a comprar más la película delgada para grandes instalaciones sobre suelo? La respuesta, en el próximo capítulo o frase.

La compañía Tempe, radicada en Arizona espera comenzar su producción este año a través de su unidad TetraSun, que ha adquirido en abril, con un producto para cubiertas . Reconoce que compañías como SolarCity seguirán dominando el mercado de los pequeños sistemas solares.

Ahora resulta que First Solar, la reina de la película delgada, tiene que comprar apresuradamente otra empresa de módulos convencionales para poder vender al menos un colín en el mercado (indefinido en este artículo, aunque supuestamente prometedor) de las pequeñas instalaciones sobre cubierta. Empieza a dar la impresión de que nos habían contado una película, pero efectivamente delgada.

“No veo razón alguna por la que nuestras industrias no puedan crecer juntas”, dijo Hughes en una entrevista. “Continuaremos suministrando a las empresas eléctricas y al sector comercial e industrial. Para los EE. UU. les dejaremos el mercado residencial”.

¡Qué generoso, el tal Hughes de First Solar. Ahora dice que pueden convivir juntos con los de SolarCity, que les habían comido el mercado y que a ellos les dejarán el mercado residencial. En fin, encaja todo, pero como si no encajase nada.

Desde esta perspectiva, el Mercado solar de grandes instalaciones parece saludable. El año pasado se instalaron unos 3,3 GW de grandes plantas solares, un 84% más que en 2012. Eso representó el 69% de las instalaciones solares de EE.UU., según un informe de Goldman Sachs de 6 de enero.

Para ser los EE. UU. esta cifra parece algo escasita y un punto ridícula, si quieren conseguir un reemplazo creíble de energía fósil por energía renovable.

Enmascarando el desplome

Estas cifras enmascaran un amenazante desplome, porque las grandes instalaciones tardan años en completarse. Los Megavatios instalados en 2013 se vendieron años antes y las ventas se dirigen ahora a un declive. Goldman Sachs espera un crecimiento anual compuesto del 8% para los grandes proyectos, entre 2013 y 2016.

Frases ininteligibles que van soltando deslavazadas y de las que difícilmente se pueden extraer conclusiones serias, aunque alguna de ellas resulte muy sintomática. Por ejemplo, que mientras el periodista de Bloomberg dice que las ventas enmascaran un desplome y que las ventas futuras se encaminan a un declive, Goldman Sachs (no es mi favorita en previsiones, vaya esto por delante) espera un crecimiento acumulativo del 8% para grandes proyectos entre 2013 y 2016. ¿Cómo se come esto? Pues es difícil de digerir. Un 8% no da para nada (aunque todo lo acumulativo, si es a largo plazo da siempre para mucho. Ver la frase de Al Bartlett), pero si los grandes proyectos crecen así y First Solar era la reina de este tipo de proyectos ¿por qué está cambiando tan radicalmente de posición sobre ellos y dice antes que ya no le van a comprar mucho más?

“Vemos que FirstSolar tiene un enorme hueco que llenar según esta demanda decae”, escribió en un informe a los clientes, el analista de Goldman Lee, cuando rebajó a FirstSolar de recomendación de compra a recomendación de venta. Megan Riley una portavoz de Goldman Sachs dijo ayer que Lee no tenía nada que comentar.

No comentaré las calificaciones bursátiles, que tanto preocupan a algunos y en este caso a First Solar, a la que arrastran por el suelo con la última de Goldman Lee.

Parte de la estrategia de FirstSolar es conseguir más ventas en el exterior. TetraSun el negocio que compró el año pasado para instalaciones sobre cubierta, está centrándose en Japón, que se prevé sea este año el segundo mayor mercado solar después de China.

Pero hombre, con lo prometedor y poderoso que es el mercado potencial solar fotovoltaico estadounidense ¿y ahora First Solar va a enfocarse a vender en el exterior, a través de la empresa que adquirió a toda prisa? Esto huele ya fatal y a gato encerrado. Y encima planteando venderle a Japón, país que anda desesperado por lo de Fukushima y sus 50 plantas nucleares cerradas, rebuscando migajas energéticas por dónde sea e incluso planteándose seriamente (¡qué peligro!) volver a abrir todas esas plantas.

FirstSolar espera que una “parte sustancial” de los ingresos y de las actividades de operaciones provenga de esta vía en los proyectos norteamericanos, según su informe anual de 2013.

¡Que poco dice eso de “parte sustancial” de sus ingresos!

Acuerdos en el exterior

Como se desprende de esto “podemos tener un mayor porcentaje de nuestras ventas netas futures, de beneficios operativos y de flujo de caja provenientes de ofertas hechas fuera de Norteamérica” según el informe.

Hughes está intentando conseguir acuerdos en Oriente Medio, India, Australia y Sudamérica. La compañía evalúa en unos 10,66 GW los pedidos potenciales a finales de 2013, incluyendo 5,9 GW de oportunidades fuera de los EE. UU.

10 GW de pedidos potenciales, si hay suerte. Esto son dos plantas nucleares anuales, en todo el mercado global. Esta es la primera empresa estadounidense y una de las mayores del mundo que todavía no ha dado en quiebra o concurso de acreedores. Bonito panorama para creerse que la energía solar fotovoltaica va a ser la primera fuente de energía primaria en el mundo.

Las instalaciones residenciales sobre cubierta son el sector solar de más rápido crecimiento en los EE. UU. Las instalaciones crecieron un 60% en 2013 hasta los 792 MW y seguirán liderando la industria este año, según la Solar Energy Industries Association.

Gran parte de la demanda está estimulada por la disponibilidad de programas que financian los módulos sobre cubierta con muy poco o ningún coste para los clientes. Ese modelo fue promovido inicialmente por compañías como Sunrun Inc, Vivnt Inc y SolarCity que sobrepasó a First Solar este año para convertirse en la compañía solar más valiosa de los EE. UU.

Y volvemos con la burra al trigo y a la ingeniería financiera para enmascarar y seguir ocultando que si se instala algo, sea en grandes instalaciones sobre suelo o en pequeñas instalaciones sobre cubierta, hay que andar con programas que financian módulos FV. Si no hay soporte de la sociedad movida por energía fósil, no se instala ni un vatio pico. Pero no hay peor ciego que el que no quiere ver.

SolarCity, con base en San Mateo, California, había instalado un total acumulado de 567 MW en sistemas sobre cubierta a finales de 2013 y espera casi duplicar esa cantidad este año.

Este negocio está cambiando la generación eléctrica de unos pocos lugares remotos a muchas pequeñas instalaciones más cercanas al usuario final, un modelo llamado de generación distribuida.

“El futuro de la energía solar es la generación distribuida”, dijo en una entrevista el director general de SolarCity, Lyndon Rive. “FirstSolar se ha posicionado fuertemente en el lado de las compañías eléctricas”

Acaban de descubrir la pólvora estos señores. Ahora resulta que el modelo se orienta hacia el modelo alemán de instalaciones pequeñas sobre cubierta, que es el colmo de la ineficiencia por MW instalado. Sus más de 36 GW de potencia solar FV instalada producen el 4,7% de la electricidad consumida (579 TWh), mientras España con escasos 4,7 GW (casi ocho veces menos) produce el 3,1% de origen solar FV de toda la electricidad consumida (273 TWh); es decir, Alemania sale a 756 MWh/MWp instalado y España sale a 1.800 MWh/MWp instalado. El doble, pero el mercado, tan sabio y tan dispuesto a cambiar las energías fósiles por renovables muy eficientes, va hacia el modelo alemán. Enhorabuena, genios.


Algunos datos más sobre el declive inminente de Dakota del Norte

Jean Laherrere, cofundador de ASPO, nos ilustra de nuevo sobre la situación más actual de la producción de petróleo no convencional en Dakota del Norte y Bakken. Creo que pronto se empezará a desinflar la burbuja estadounidense sobre producción de petróleo y gas no convencional, que ha servido en todo el mundo para crear falsas expectativas de una mucho mayor abundancia futura de este tipo de combustibles fósiles, pero que no ha logrado repetir ese fogonazo productivo de este último lustro en otras cuencas fuera de EE. UU., para haber tantos apologistas de estas tecnologías que actúan como si este fulgor temporal del coloso estadounidense pudiese ser perfectamente extrapolable a cualquier otro lugar con yacimientos no convencionales.

Según Laherrere, la mejor forma de ajustar la correlación (de la producción) con el número de pozos es de 20 meses

20140216 Producción de petróleo de Dakota del Norte

20140216 Prod de petróleo de DN y numero de plataformas

Según Laherrere, sus previsiones de 2.500 millones de barriles para Bakken parece que se van verificando

20140216  3 Dakota del Norte prod mensual de petróleo de Bakken

Pero tendremos que esperar unos cuantos meses más para asegurarnos del cenit, una vez que los efectos del mal tiempo (en la producción) hayan pasado.


De progresistas y biofísica económica

El pasado 6 de febrero, Vicenç Navarro, volvía a la carga contra Florent Marcellesi, un precandidato a las elecciones europeas por Equo, que abandera el principio molesto y tan desagradable como inevitable de cómo enfrentar el decrecimiento que nos viene encima de la mejor manera posible. En un artículo del diario digital Público titulado Los errores de las tesis del decrecimiento económico, arremetía contrsa los que propugnan el cambio de modelo hacia este horizonte.

Primero hubo un debate interno entre las personas más cercanas a los principios de las limitaciones físicas de nuestro planeta y que tienen una visión biofísica de la economía.

En general, aunque en este grupo se ha discrepado bastante de algunas de sus tesis y sobre todo, del furor y displicencia con que ha abordado sus diferencias con Florent en este terreno, en este grupo se ha tratado de forma exquisita de no tratar de herir o dañar la imagen pública de Vicenç Navarro, que es un luchador reconocido por la mejora de los derechos de las personas y de una economía más justa y solidaria.

Finalmente, en un artículo magistral, Antonio Turiel desgranaba públicamente los aspectos sobre estas diferencias de criterio y exponía, muy educadamente, el punto de vista de los llamados «decrecentistas» y de paso, algunos puntos sobre las íes a Vicenç Navarro, obviamente en un medio de mucha menor trascendencia que Público, pero que tiene un creciente número de seguidores. En su blog The Oil Crash contestaba con este título en lo que, a mi juicio, ha sido la más completa respuesta al profesor Navarro, famoso y respetado sociólogo y politólogo español, experto en economía política y políticas públicas, que ha sido catedrático de Economía Aplicada en la Universidad de Barcelona y actualmente es Catedrático de Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Pompeu Fabra y además vela armas nada menos en la Universidad estadounidense John Hopkins.

También el asunto ha merecido la atención y los comentarios de Jorge Riechmann, otro peso pesado académico, que en su blog http://tratarde.org/ titula Marcellesi, Navarro, Turiel y los límites del crecimiento , donde reivindica a Barry Commoner, también criticado por Navarro y otras reflexiones y apuntes interesantes.

En mi escasa disponibilidad de tiempo, había enviado previamente un par de comentarios al respecto, que se alinean más con las tesis y posturas que defiende Florent, que con las que defiende Vicenç Navarro, sin quitar un ápice al valor de sus denuncias frente al poder. Y alguno de los miembros del grupo me pidió que elevase el mismo a Crisis Energética, lo que hago, adaptando ligeramente el escrito original principal. Allá va.

En mis presentaciones suelo ilustrar esta situación con el gráfico a continuación:

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FIGURA 1

Ofrezco el consumo de energía per capita y país o región, en colores según el tipo de energía utilizada y llevado todo a vatios de potencia equivalente per capita (eje de ordenadas negro). Los datos son del Statistical Review of World Energy de BP de 2011. Con un asterisco, fijo el nivel (en color rojo y eje de ordenadas rojo) del PIB per capita nominal en US$ que ofrece el FMI en esas mismas regiones o países.

En el eje de abcisas, figuran la población de cada país o region, hasta alcanzar los 7.000 millones. Así, el rectángulo que forma cada país o región con la suma de todos sus tipos de energía muestra muy bien su peso en el conjunto del mundo en refrencia o relación con los demás.

El consumo promedio mundial aparecía en 2011 en unos 2.600 vatios de potencia per capita. Para ponernos en contexto, el ser humano es una perfecta máquina que apenas necesita el equivalente a 100 vatios de potencia promedio de consumo para satisfacer sus necesidades metabólicas.

Se observa aquí el principio de Pareto, en este caso sobre la desigualdad en el reparto de la riqueza (medida por PIB) y muy paralelamente (como no podría ser de otra forma) en el consumo de energía y acceso a los bienes materiales.

Aunque en estos últimos cinco años el diagrama ha cambiado algo de forma, por ejemplo, haciendo que China sobrepase el promedio mundial y que los países de la derecha, básicamente los ricos u OCDE no hayan apenas subido en consumo de energía o incluso hayan bajado drásticamente (casos de Italia o España, por ejemplo), la realidad es que apenas ha conseguido irse acercando de una distribución tipo 80/20 hacia una 70/30; esto es, que el 20% de la población mundial acapare el 80% de los recursos (y del PIB) y que el resto del 80% de la población mundial se tenga que conformar con un 20% del PIB y de acceso a los recursos (energéticos y de los demás bienes materiales) y que esto haya pasado en unos años a una distribución 70/30. Y curiosamente, no por gusto o planificación de la decencia occidental, sino más bien todo lo contrario: para gran susto de Occidente, que ya clama contra China por «querer ser como nosotros», incluyendo algunos sectores de la izquierda occidental.

Es cierto, que como todo sistema de representación, este gráfico adolece de algunas precisiones, que admito por adelantado. Por ejemplo, si se hiciese «zoom» en cada país, se podría observar, efectivamente, una élite muy minoritaria (esas 500 familias de las que hablaba Vicenç Navarro o del 1% del que habla el 15M), cuyo PIB y quizá hasta su consumo per capita de recursos enerrge´ticos, si se quiere, saldría disparado hacia arriba fuera de este gráfico. Pero eso haría apenas bajar un poco el promedio nacional que esas élites controlan y parasitan. Sin embargo, como muy bien ha señalado algún miembro de este grupo sobre ecomodelización, esas élites, aunque también puedan disparar su consumo per capita de energía (pienso en el yate Fortuna o en aviones privados y demás), no pueden consumir recursos y energía al nivel equivalente que poseen de acumulación dineraria o financiera. Pero sí contribuyen, donde tienen sus sedes y centros de operaciones (la City de Londres, Nueva York Singapur, Luxemburgo, y por extensión países como Reino Unido, EE. UU. UE en general y pocos más) a que éstos sean nodos nacionales o regionales de consumo brutales, que todavía llamamos desarrollados y a los que aspira todo el mundo (lamentablemente).

Y ahora llegamos al meollo de la cuestión. Supongamos que apoyamos todos la tesis de Vicenç Navarro sobre la necesidad de arrebatar el control de esas élites por parte de la «mayoría democrática» (no se qué sería eso en Senegal o Nigeria o en Arabia Saudita, por poner sólo unos limitados ejemplos).

Supongamos que consiguieramos de forma mayoritaria y democrática el control de las finanzas y de los recursos materiales, entre ellos los energéticos y se lo pudiésemos arrebatar a esas élites, que perderían la capacidad de gobernarnos y controlarnos y que hasta que pudiésemos expropiar sus insultantes riquezas y acopios. Muy bien. Habríamos conseguido algo muy importante, necesario y conveniente: eliminar las estrechísimas agujas del consumo y del PIB que saldrían de cada país o región, que no he pintado en el gráfico y que se disparaban hacia los cielos del PIB y del consumo de recursos, de ese 1% o de las 500 familias. No es poco. Además, estaríamos en disposición de poder empezar a mejor redistribuir esa riqueza y acceso a los recursos que nunca. Muy bien. Perro entonces, con las élites derrotadas, nos encontraríamos en la situación exacta del gráfico de más arriba.

Veamos ahora como deberíamos proceder, ya que disponemos del poder y del control. ¿Cual sería el siguiente trabajo a llevar a cabo? ¿Cómo orientarlo? Supongo que esto hay que plantearlo como necesaria hoja de ruta, incluso antes de haber conseguido arrebatar el poder a las élites y tenerlo en los programas progresistas y verdaderamente democráticos, ¿no es cierto?

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FIGURA 2

De aquí, se puede preguntar al respecto:

¿Cree sinceramente Vicenç Navarro que sería posible llevarnos a los 7.000 millones y especialmente a los países y poblaciones de la izquierda del gráfico y a las poblaciones marginadas y excluídas, de los países de la derecha del gráfico, al nivel de los llamados «Estados del bienestar» de los países occidentales que aparecen en ese mismo gráfico a la derecha? Porque eso, haciendo cálculos muy sencillos y bastante irrebatibles, nos llevaría a tener que multiplicar el consumo de energia por cuatro, si queremos el bienestar del American Way of Life, en el que Navarro ha vivido durante mucho tiempo. Pero si se conformase con que todo el mundo llegase al nivel europeo, en el que Vicenç está ahora más asentado, habría que multiplicar el consumo de energía mundial por dos y con ellos la necesidad de transformar la naturaleza y extraer los recursos necesarios para ello. ¿Podemos? ¿Hay energía para ello? ¿Hay recursos suficientes?

¿De qué se trataría, de subir todos a los estándares occidentales y terminar de reventar más arpisa todavía (que es por dónde va China, por ejemplo, con todo el derecho del mundo, mientras existan los insultantes niveles de los países de la derecha del gráfico) o por el contrario, de que los occidentales intentasen destripar algo menos el planeta y por tanto tuviesen que replantearse clara y rápidamente un DECRECIMIENTO urgente y dramático aunque eso si, sin prescindir de las cosas que dotan de una mínima dignidad al ser humano?

Yo soy ya un perro algo viejo y estoy cansado de las caridades del 0,7% del PIB, que es lo qeu muchos bientintencionados occidentales creen que sus ricos gobiernos de la derecha del gráfico deberían ceder al resto de los países pobres del mundo y que ni siquiera cumplen. Ya está bien. Miren de frente a ese gráfico oneroso. Lo que les está diciendo, es que si de verdad quieren igualdad y justicia, lo que los de la derecha deben ceder a los de la izquierda (en el gráfico y en el espectro político) no es el 0,7% del PIB que ofrecieron de mala gana y ni siquiera cumplen. No es ni siquiera el 7% del PIB. Debería ser, matemáticamente hablando el 70% del PIB y quizá así pudiéramos empezar a hablar de la justicia redistributiva que tanto reclamamos con la boca pequeña desde los mentideros de la izquierda occidental.

Si Navarro cree que se podría hacer de otra forma (¿desmaterializando la economía, quizá, en una suerte de «to’ er mundo e güeno»?), debería aclararnos con un cierto detalle que debería ir más allá de sus proclamas bienintencionadas, como piensa afrontar este reto, porque si entiende la paradoja de Jevons y ha visto la relación estrecha entre economía (entendida como PIB) y consumo de energía y bienes materiales, se debería dar cuenta de que no hay más cera que la que arde. Debería explicar cómo superar la siguiente evidencia:

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FIGURA 3. Fuente: Fuente: World Energy Outlook (WEO) 2009 de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Página 59

Es decir, que desde que tenemos memoria, a nivel global, la subida del nivel de riqueza (entendido como PIB, pero también como nuestro añorado Estado del Bienestar o de conquista de los llamados «derechos sociales» de los países desarrollados o incluso de la «reconquista» de esos derechos sociales adquiridos, que ahora algunos ya sienten que pierden en su amado Occidente) se han sustentado, en una buena parte, a base de extraer recursos y consumiendo más y más energía, destrozando el planeta, en suma. Sólo hay que ver la gráfica 3. Vicenç podría aspirar, como mucho, a que los países pobres (aquí NO OCDE de forma simplificada) pudiese bajar su pendiente de color rojo y alcanzar la pendiente de color azul de los OCDE, los listos, los desarrollados, los más adelantados y civilizados, los que tienen o tenemos más tecnología para «hacer más con menos». Y aún así, siguen teniendo que consumir más para crecer más. No hay un mundo espiritual en el que el bienestar que la gente conoce se alcance sin tocar ni manchar los recursos naturales de que dispone el planeta. Además, la línea azul de menor pendiente de la que presumen los OCDE (más PIB con la misma cantidad de energía), se suele conseguir a base de enviar las industrias más contaminantes e intensivas en energía a los países no OCDE (línea roja), de forma controlada y manejando sus beneficios y luego cargarles contablemente con el mochuelo de que no saben hacer las cosas de forma limpia y eficiente como ellos y de que nosotros estamos mejorando mucho nuestra «eficiencia energética» a base de tecnología. Cinismos occidentales y falsas creencias en pajaritos embarazados, que quedan desmontadas en cuanto nos atrevemos a mirar al mundo en su totalidad, a través de la línea verde resultante del gráfico 3. No nos engañemos: crecer es consumir más energía y más recursos y todos ellos son limitados.

Es decir, el crecimiento de los países de la derecha del gráfico de la figura 2, se ha hecho, sobre todo, a base de pisar y explotar a los demás países oprimidos, de reventar sus recursos naturales en beneficio, no sólo de las élites serviles y mamporreras de los países explotados, al servicio de las élites de los países desarrollados, sino también con la connivencia activa y pasiva de los ciudadanos occidentales, muy confortablemente instalados en esos «Estados de Bienestar». Claro que este es un mensaje muy duro, horrorosamente duro para muchos izquierdistas bienpensantes occidentales, que habían arrumbado por obsoleto el principio de internacionalismo proletario y se habían construido mentalmente la falacia de que sus derechos sociales se habían ganado a pulso con el sacrificio de las luchas obreras de sus países, sin por ello perjudicar a nadie más en lugares muy distantes (o sin querer ver cómo quedaban perjudicados).

Esta es la suma cero a la que me refería en el anterior correo. Dado un nivel de extracción y uso de bienes materiales y energía equivalente a una riqueza X en el planeta, el que haya ciudadanos cuyos países que estén en el 20% de los que consumen el 80% IMPLICA NECESARIAMENTE que ello es porque hay ciudadanos de otros países del mundo, el 80% de ellos, que malviven con el 20% de los recursos restantes. Matemáticas elementales y brutales, que van mucho más allá de cambiar la actividad economica de hacer armas por la de hacer medicinas, que propone Navarro, algo con lo que no podría estar más de acuerdo, siempre que no lo hagan las Big Pharma en su provecho. O de pasar de consumir energía fósil a consumir energías renovables. Vicenç haría bien en repasar, una y otra vez los gráficos aquí mostrados y ver dónde están las energías renovables, para colocarlas en su contexto. Y haría muy bien, si tuviese algo más de modestia, en leerse los estudios del grupo de Dinámica de Sistemas de la Universidad de Valladolid sobre los límites de las renovables, para entender mejor de lo que habla, cuando critica a los que proponen decrecer para ser más justos.


Un resumen del problema socio-económico-energético

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Una de las sesiones del STD 2013 (Foto: UPC).

El pasado junio recibí una invitación para participar en el 6º International Seminar on Sustainable Technology Development, que organiza la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) en su campus de Vilanova i la Geltrú y que se enmarca en el Master de Sostenibilidad que organiza esta facultad. Este año pasado el seminario se centraba en los sistemas energéticos y en la participación de las comunidades, y me invitaron en un formato “diálogo” junto a Pep Salas de la consultora Enerbyte y Lluís Batet, profesor del Departamento de Física e Ingeniería Nuclear de la UPC.

Como la intervención individual debía ser breve (15m), me hice un pequeño guion muy sintético para acompañar las apenas 7 diapositivas que mostré, y al releerlo he pensado que sería un buen resumen de mi opinión sobre la sostenibilidad actual de nuestros sistemas socio-económico-energéticos. Además, he añadido las respuestas a un breve cuestionario que los organizadores nos pidieron que contestáramos los ponentes. Como he dicho, es muy sintético y merecería más explicaciones, pero es lo que tienen los resúmenes…

STD 2013: Diálogo – Daniel Gómez

Algunas de las ideas que me gustaría presentar:

– La demografía (8,6 mil millones de seres humanos en 2035 ) y el desarrollo seguirá aumentando el crecimiento de la demanda de energía durante algunas décadas (35% en 2035 en el Escenario de New Policies del WEO 2012), incluso teniendo en cuenta el estancamiento observado en la demanda de energía en los países desarrollados. Todos los escenarios de la AIE muestran un aumento de la demanda: 1,2 % anual en el New Policies, el 1,5 % en el Current Policies y el 0,6 % en el escenario 450).

– Las transiciones energéticas toman tiempo (históricamente, una fuente de energía primaria tarda 30 años para en cubrir el 10 % de la demanda) , pero el plazo de ejecución necesario para hacer la transición a un sistema energético bajo en carbono exige una acción decisiva ahora. Las fuentes de energía de bajo carbono crecen rápidamente, pero a partir de una pequeña parte del total. También, necesitamos electrificar los usos actuales de los combustibles líquidos derivados de los combustibles fósiles en el transporte.

– La pobreza energética: casi 1,3 millones de personas siguen sin tener acceso a la electricidad y 2,6 mil millones todavía no tienen acceso a agua limpia para cocinar.

– Los combustibles fósiles no convencionales son realmente abundantes, pero sus costos ambientales son altos y su Tasa de Retorno Energético (TRE) es baja. La propaganda sobre el petróleo  y el gas de esquistos muestra que estamos «rebañando el plato”.  Incluso si los recursos de combustibles fósiles convencionales y no convencionales pueden ser extraídos económicamente todavía enfrentamos límites a las emisiones de gases de efecto invernadero.

– Nuestro sistema socio-económico se basa en la suposición de que todos los problemas ambientales pueden ser resueltos a través de mecanismos de precios y tecnologías eficientes y que todos los recursos naturales son generalmente inagotables (y los que no lo son pueden ser fácilmente sustituidos).

– La gestión de la actual crisis financiera y económica demuestra que hay una fuerte resistencia al cambio entre los poderes y las instituciones gobernantes, y que hay una desconexión entre el mandato de los gobiernos elegidos democráticamente y lo que realmente pueden cambiar.

– La Tasa de Retorno Energético (TRE) se refiere a cuánta energía se obtiene a partir de una unidad de energía invertida en una actividad de producción de energía. Es un parámetro crítico para la comprensión y clasificación de diferentes los combustibles. Tenía antecedentes en la idea del » análisis energético neto» utilizada por Leslie White, Kenneth Boulding y sobre todo Howard Odum.

Respuestas a las preguntas:

1-. Pensando a largo plazo, ¿cuáles son los mecanismos necesarios para fomentar el desarrollo de un sistema energético eficiente y sostenible?

En mi opinión no vamos a tener un sistema eficiente y sostenible hasta que nuestro sistema socio-económico también está orientado hacia la eficiencia y la sostenibilidad, lo que estamos pidiendo ahora es tener un sistema de energía «sostenible» que pueden alimentar el crecimiento infinito en el consumo de material que exige nuestra economía, y que es claramente insostenible.

2-. ¿Qué instrumentos facilitan la participación ciudadana en los sistemas energéticos?

Necesitamos tener una mayor transparencia en los mercados de energía (España), que ayudaría a comprender mejor la formación de precios y cuáles son los costos reales (es decir: un aumento de la penetración de las fuentes renovables en la red eléctrica y sus impactos asociados en el territorio frente al impacto concentrado de la planta de combustible fósil clásica o de energía nuclear). Las cooperativas parecen un buen comienzo para promover las energías renovables y el balance neto en la autoproducción.

3-. ¿Cuáles son las posibilidades de lograr un sistema que opere bajo principios ecológicos y socioeconómicos?

En el sistema actual, muy pocas, como dije en la primera pregunta. Nuestro sistema no está orientado hacia la sostenibilidad, sino hacia la adquisición de los recursos naturales con el fin de disiparlos (¡ni siquiera es «producción»!). Todavía estamos gobernados por el viejo paradigma de un “mundo vacío”, cuando en realidad nos estamos acercando rápidamente a un «mundo lleno”, donde no hay más espacio para los GEI,  y donde se está agotando el capital natural y su capacidad para absorber los desechos. Una clara muestra de esta contradicción es que el indicador de la riqueza dominante, el PIB, no tiene en cuenta el agotamiento del capital natural. Asimismo, los costes del crecimiento económico son compartidos de manera desigual; nos quedamos los beneficios, compartiendo sus costes con los pobres, las generaciones futuras y otras especies. El mandato ético y moral es ayudar a los pobres a alcanzar un nivel digno de riqueza material, mientras que los países desarrollados y el mundo en desarrollo convergen a un nivel de caudal de material que por lo menos nos de algo de margen para maniobrar en caso de que los peores escenarios (escasez de energía, cambio climático desastroso) se hagan realidad.


¿CUÁNDO ES HORA DE SALTAR? IMPRESIONES DESDE SAO PAULO.

Mi última visita por motivos familiares a Brasil, a la ciudad de Sao Paulo, me ha hecho reflexionar profundamente sobre la concepción, modelo de crecimiento, urbanismo, habitabilidad y sobre todo la sostenibilidad o la falta de ella de als grandes ciudades o núcleos urbanos de población, de las que Sao Paulo es toda una referencia.

Se dice, en el cuento de la rana y la olla de agua hirviendo, que si se echa una rana a una olla con agua hirviendo, ésta salta inmediatamente hacia afuera y consigue escapar de la olla sin siquiera quemarse. Pero si ponemos agua en la olla a temperatura ambiente y echamos una rana, ésta se queda tan fresca dentro de la olla. Y si a continuación, comenzamos a calentar el agua poco a poco, la rana no reacciona bruscamente sino que se va acomodando a la nueva temperatura del agua hasta perder el sentido y finalmente morir literalmente hervida.

La rana y la olla

Figura 1. La historia o el cuento de la rana en la olla.

La siguiente, es una breve reflexión de una pequeña rana que ha caído casualmente de golpe en la cacerola con agua ya muy caliente y se siente algo escaldada, pero que ve millones de ranas flotando rutinariamente en el caldo crecientemente caliente de la cacerola. Oyó a muchas ranas croar que la situación se estaba haciendo insostenible, pero casi ninguna saltaba fuera. Quizá es que para ver hasta qué punto un problema en el que estamos inmersos es lo suficientemente grave, hay que salirse de él, verlo desde otra perspectiva.

La pregunta, que obviamente termina sin respuesta, es que cuál es el punto de temperatura que nos debería hacer conscientes de que hay que saltar fuera de la olla. No lo sé, sinceramente, no lo sé, ni en Sao Paulo, ni en muchas otras grandes ciudades como Madrid.

Comencemos por una breve introducción al escenario del problema.

Una ciudad, un área metropolitana, un Estado y una nación federal

La ciudad de San Pablo (São Paulo) es hoy una tremenda megápolis de casi 11 millones de habitantes aunque su área metropolitana —bajo el concepto de ciudad propiamente dicha— que integra 38 municipios absorbidos por el crecimiento desaforado de esta ciudad, cuenta con una población de 19.889.559 habitantes. Es la capital del Estado de Sao Paulo, uno de los 26 Estados con que cuenta la República Federal que es Brasil. Ocupa 248.800 Km2, aproximadamente la mitad de la superficie de España. Este Estado tiene 42 millones de habitantes, casi la población española y es el más rico, en términos económicos, de Brasil, con aproximadamente un tercio del PIB de Brasil. Sólo este Estado ya supone casi el PIB de España y es más alto que el de cualquier país sudamericano.

Brasil, es a su vez el gigante latinoamericano, con una población que ya supera los 200 millones de habitantes y dispone de 8.500.000 Km2 de territorio que incluye la mayor masa boscosa del planeta, la Amazonia. Su PIB y es más de dos veces el de España, con 2.421.637 millones de US$ (nominal) y una renta per capita de 12.339 US$ por habitante. El Índice de Desarrollo Humano es de 0,730, que se considera alto, aunque su distribución de riqueza dista mucho de ser homogénea.

PIB y Población de Brasil

Figura 2. Evolución de la población de la ciudad de Sao Paulo desde 1872 hasta 2010. Fuente: Instituto Brasileiro de Geografía e Estadistica.

Con el gráfico de evolución del crecimiento de población de la ciudad de Sao Paulo e incluso considerando que la tasa de crecimiento se modera considerablemente desde 1980, considerando este lapso, el crecimiento poblacional del periodo 1980-2010 es del orden del 1% anual (nacimientos-muertes). Si extrapolásemos ese crecimiento al área entera de Sao Paulo con sus cerca de 20 millones, para el año 2035, se podría esperar que este conglomerado urbano alcanzase la espantosa cifra de 25 millones de habitantes. Un crecimiento del 25% en poco más de dos décadas. Si la población mantiene el nivel de ocupación de territorio por habitante, cabe esperar que el Sao Paulo de 2035 tenga un 25% más de superficie y que las distancias promedio a recorrer sean del orden del 5-7% más, si ello fuera posible. Algo parecido a su nivel de consumo de recursos, entre otros, el energético. Ello, por no hablar de que la población tiene graves desequilibrios económicos entre las clases altas y las más bajas, que son las más numerosas. Si el esfuerzo incipiente, que se ha quedado en no mucho, de los supuestos gobiernos de izquierda recientes en Brasil, llevase a un aumento del nivel de vida (generalmente siempre entendido como aumento del nivel de consumo de bienes y servicios por habitante), la multiplicación de la demanda de espacio, viviendas, infraestructuras, y de bienes sería estratosférica.

Un Brasil de actualmente 200 millones de habitantes, se convertiría en un país de 250 millones para 2030 con esa baja tasa media geométrica de crecimiento de la población.

Un vistazo al panorama energético brasileño

En cuanto a consumo de energía, una comparativa con España sería la siguiente:

Comparativa España Brasil

Tabla 1. Comparativa Brasil-España en consumo de energía en millones de toneladas equivalentes de petróleo (MTep)

Su inmenso poderío en producción hidroeléctrica queda claramente destacado. En energías renovables, sin embargo, España supera en términos absolutos en producción eólica con 22 GW instalados, frente a los 2,5 GW de Brasil (2012). La energía solar es también más favorable a España, con cerca de 7 GW de potencia instalada; en Brasil apenas están despegando, aunque acaban de establecer un mecanismo de subastas, por las que esperan alcanzar los 9 GW de potencia instalada. Sin embargo, todavía su consumo de energía primaria per capita es menos de la mitad que el del español, con toda la crisis que se supone sufre el segundo desde 2008 y con todas las alabanzas sobre la consideración positiva de emergente de Brasil.

Brasil, a pesar de ser ya un gran productor de petróleo, sigue siendo importador.

Brasil petroleo segun Mazama Science

Figura 3. Producción, consumo e importaciones de petróleo en Brasil. Fuente:
http://mazamascience.com/OilExport/ tomado de BP.

Por alguna razón, la AIE estima que Brasil será la gran sorpresa del crecimiento de la producción de petróleo de ahora al 2035, según su World Energy Outlook (WEO) de 2013 y espera que pase de producir los actuales 2 millones de barriles diarios a nada menos que 6 millones de barriles diarios para esa fecha no tan lejana, todo ello, fiando el crecimiento de la producción a las prospecciones y reservas declaradas en aguas profundas.

Petróleo en Brasil

Figura 4. Producción de petróleo estimada para Brasil en el Escenario de Nuevas Políticas del World Energy Outlook de 2013 (WEO 2013) de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). Página 369.

Esta misma organización tan optimista, prevé un crecimiento de la demanda interna de petróleo como sigue:

Demanda brasileña de líquidos combustibles por producto

Tabla 2. Demanda brasileña por tipo de producto combustible en miles de barriles diarios, según el WEO 2013 de la AIE. Página 355.

De los gráficos anteriores, se desprende que la AIE espera que Brasil pase a convertirse en un país exportador neto de petróleo, a pesar del crecimiento interno de la demanda de los 2.695.000 barriles diarios de 2012 a los 4.201.000 barriles diarios de 2035, que incluyen un considerable aumento de la producción de biocombustibles, que crece anualmente de forma acumulativa por encima de la producción de origen fósil.

La apuesta de Brasil por los biocombustibles no tiene parangón en el resto del mundo. En un equivalente energético, representan el 12% de todos los combustibles líquidos que se consumen en Brasil. Los que llegan por primera vez a este país, pueden percibir el olor intenso a alcohol quemado.

Lo que en el resto del mundo se empieza a reconocer como un imposible de la sostenibilidad (tratar de alimentar los más de mil millones de motores de combustión interna con derivados salidos de los cultivos que agotan la tierra), aquí parece que según la AIE y el propio gobierno de Brasil se mantiene como política energética hasta 2035, fecha en la que, a pesar del aumento previsto del consumo nacional, se sigue manteniendo en un porcentaje similar la contribución energética de los biocombustibles al consumo nacional de líquidos.

Esto tiene un reflejo social importante. Los ciudadanos saben perfectamente del menor poder de combustión por volumen equivalente de los biocombustibles frente a los combustibles fósiles equivalentes. Las muy numerosas gasolineras de las grandes ciudades así lo reflejan en sus precios. Cabe destacar la curiosidad de que los precios de los biocombustibles se ven afectados por la temporada en la que se compran, en función de si hay disponible más o menos stock en los grandes depósitos de las empresas del downstream (río abajo o de las refinerías a las estaciones de gasolina).

En el anecdotario brasileño cabe apuntar el elevado número de personas que atienden todavía en cada gasolinera, en línea totalmente opuesta a Europa, donde se mecaniza al máximo el servicio para convertir al cliente en manipulador y además consumidor de otros productos. En Brasil puede haber, seguramente debido a las políticas de empleo del gobierno, unos 8 empleados por gasolinera y turno, ofreciendo desde el rellenado, al lavado de vidrios o del coche, revisión de neumáticos, etc., etc. Quizá sea ésta una de las razones ocultas por las que el desempleo está en un 5,5%, aunque la línea de la pobreza pilla al 21% de la población por debajo de ella. El retroceso aparente de una mecanización que de todas formas existe y que, por ejemplo, en Europa y en España en concreto, sirve para desalojar trabajadores hacia la exclusión para permitir que las empresas aumenten la competitividad (no se sabe bien hacia dónde), es algo que invita a reflexionar a los que estamos viviendo el proceso de degeneración laboral hacia modelos más parecidos al brasileño.

Algo parecido pasa en muchos otros sectores: autobuses y hasta microbuses con conductor y cobrador, a la antigua usanza en Europa; tiendas en las que varios atienden, pero siempre cobra otro, restaurantes, cafeterías y hasta ascensores totalmente automatizados que hasta en los centros comerciales de mayor lujo, disponen de un ascensorista que ni siquiera tiene que girar una palanca, sino apretar el mismo botón que apretaría el usuario.

Lo curioso es que a pesar de que esperan un crecimiento de la demanda interna de combustibles líquidos del 1,9% anual a lo largo de este periodo, la AIE estima que se hará en un entorno como el siguiente:

PIB e indicadores de población Brasil

Tabla 3. PIB e indicadores de población para Brasil hasta 2035, según el WEO 2013 de la AIE. Página 323.

Esto es, el milagro de aumentar la producción de líquidos combustibles, principalmente no convencionales para los fósiles y biocombustibles, que se producirá a un ritmo del 1,9% anual acumulativo en promedio, pero con crecimientos de población estimados según la división de población de Naciones Unidas, de entre un 0,8 y un 0,6%, menos de lo que incluso ahora está creciendo, después de la desaceleración, pero al mismo tiempo, esperando un crecimiento económico (PIB) acumulativo anual en el periodo de un 3,7%. Sería un caso muy singular esta ganancia económica con tan poco aumento de consumo de energía interno.

En cuanto al gas natural, el gigante brasileño sigue aumentando su necesidad de importar este tipo de combustible. El siguiente gráfico muestra el volumen

Brasil gas natural

Figura 5. Producción, consumo e importaciones de gas de Brasil. Fuente: mazamascience.com/OilExport/ tomado de BP.

Este volumen de energía que Brasil consume, representa aproximadamente el 20% del petróleo que se consume en equivalente energético y el 10% del total de la energía primaria.

Las importaciones provienen fundamentalmente de Bolivia. La producción de los yacimientos nacionales, en muchos casos de la producción de plataformas marinas de Mexilhao y cercanías, más cercanas que los yacimientos de Santos.

La AIE proyecta un crecimiento enorme de la demanda que casi se triplicaría en 2035 respecto de la actual. Que esto pueda llegar a ser cubierto con las nuevas prospecciones de Santos o de Campos ya es otra cuestión.

Uno de los usos más importantes es el de la generación eléctrica, porque son elementos de apoyo a las incertidumbres de la generación hidroeléctrica, que en Brasil alcanza cifras prodigiosas, debido a sus grandes flujos fluviales, pero que precisamente dependen mucho de la climatología. Hasta dónde se desarrollará el consumo de gas por esta vía, es algo que ni la AIE se atreve a pronosticar.

Con todo, el mayor problema al que se enfrenta Brasil, es el muy alto costo energético, pero también económico, que exigen las muy complejas plataformas marinas en las que se basan las grandes promesas de crecimiento de las producciones de petróleo y gas.

Según la propia AIE, la industria del petróleo está gastando más de 30.000 millones de dólares anuales en el sector upstream (río arriba o exploración, perforación y extracción hasta refinería). Unas diez veces más que en las exploraciones iniciales. Para el periodo considerado hasta 2035, se considera que el gasto que Brasil tendrá que afrontar alcanzará los 60.000 millones de dólares anuales en promedio. Una cifra brutal que habrá que ver de dónde sale, porque representará un coste aproximado, sólo para este sector específico de la industria energética, de unos 40 dólares por cada barril que se espera extraer, si todo va como se ha planteado.

La energía neta de estos yacimientos en aguas ultraprofundas es una cuestión difícil de dirimir, por los datos.
En cuanto al carbón,

Brasil carbón

Figura 6. Producción consumo e importaciones de carbón de Brasil. Fuente: http://mazamascience.com/OilExport/ tomado de BP.

También Brasil es un importador creciente de carbón, para su industria siderúrgica. No obstante, el carbón es una fuente menor en este gran país, porque representa apenas el 5% de toda la energía primaria que consume.

El potencial renovable de Brasil, sin duda está principalmente en su capacidad para la hidroelectricidad. Esta fuente energética de calidad, pues entrega directamente en forma eléctrica refinada, representa en Brasil nada menos que el 34% del consumo total de energía primaria en equivalente. Y tiene un potencial que podría duplicarse con relativa facilidad, aunque siempre hay que poner algo en cuarentena los datos de lo que supone anegar grandes superficies y el concepto relativo que para las grandes entidades energéticas representa lo que denominan “impacto en áreas sensibles”, generalmente relacionado con los territorios indígenas a desplazar o con el anegamiento de los cada vez menores lugares protegidos.

Brasil hidroeléctrica

Figura 7. Producción hidroeléctrica de Brasil. Actual y potencial. Fuente: WEO 2013 de la AIE. Página 385, tomado a su vez de la EPE (2007) y de la propia AIE

Sólo Itaipú representa 14 GW de los que algo más de 12 GW son para Brasil y algo más de 1 GW para Paraguay. Estos grandes embalses, son un problema para la flora y la fauna local, impidiendo migrar a gran cantidad de peces (las piscinas gigantes establecidas al efecto en ascensores para llevar a los peces río arriba o río abajo, son una suerte de burla a los flujos naturales migratorios. Cambian el clima localmente, producen devastadores desplazamientos humanos y anegamientos considerables de selva.

Pero también desde el punto de vista energético, representan una debilidad asociada a su fortaleza productiva, por estar tan altamente concentrados.

Cualquier problema en Itaipú dejaría a la zona de Sao Paulo, que se alimenta principalmente de esta represa con líneas de muy alta tensión de corriente continua, en serios problemas de supervivencia y a la red eléctrica de Brasil en graves complicaciones de estabilidad. Por otra parte, la estacionalidad de las lluvias representa otro gran reto, pues es enormemente variable según el año. Algo parecido al etanol y al biodiesel, que se producen principalmente según la cosecha de temporada y hacen variar los precios de forma apreciable según el momento.

Volvamos a la macrociudad

Pero volvamos al área metropolitana de Sao Paulo. Es la mayor ciudad de América del Sur y la sexta más poblada del mundo. Es el principal centro financiero y capital económica de Brasil. Algunas fuentes la ubican como la mejor ciudad para hacer negocios en América Latina.

2'131122 Sao Paulo y Rio desde 400 km

Figura 8. Vista desde la altura de 400 Km de la Estación Espacial Internacional del área metropolitana de la ciudad de Sao Paulo, del puerto de Santos, las próximas ciudades de Campinas y de San Sebastião, de los municipios másricos de Brasil por tener llegada de oleoducto, refinerías y sede muchas de las industrias petrolíferas marinas situadas frente a estas costas. A la derecha, la ciudad de Río de Janeiro.

La vista espacial de esta macrociudad, hace temblar cualquier análisis de huella ecológica o capacidad de sobrecarga. Pensar las distancias que deben cubrir los productos necesarios para toda esa concentración humana produce escalofríos
El parque automotriz del área de Sao Paulo es de más de 7 millones de vehículos privados y la mayor cantidad de vehículos por habitante de toda Latinoamérica. En realidad, no son muchos más vehículos por habitante que, por ejemplo, en Madrid, donde hay registrados más de 4 millones de vehículos en la Comunidad. Sao Paulo aumenta en casi 1.200 nuevos automóviles diarios; los analistas ven al auto privado como un símbolo de estatus; por otra parte, nada nuevo respecto de la visión que se tiene del vehículo privado en el resto del mundo.

La contaminación provocada por los vehículos en Sao Paulo causa 4.600 muertes cada año en la mayor ciudad brasileña, un número que triplica los fallecimientos por accidentes de tránsito, que ya son bastante numerosos, según un informe divulgado en la celebración del Día Mundial sin Automóviles.

Según la investigación del Instituto de Salud y Desarrollo Sostenible, ese tipo de contaminación es responsable por la reducción de 1,5 años de vida de la población en la región metropolitana de Sao Paulo.

A pesar de algunos esfuerzos de las autoridades municipales que han inaugurado recientemente más carriles exclusivos para autobuses, que ahora alcanzan los 243 Km de longitud, esto sigue siendo absolutamente insuficiente para aliviar los crecientes problemas de tráfico de esta ciudad.

Se da la circunstancia de que esta pequeña ganancia de los nuevos últimos carriles ha despertado la ira de muchos automovilistas privados, que ven como sus espacios para circular disminuyen todavía más y aumenta dramáticamente el tiempo de los atascos para este tipo de tráfico individual. Todo ello, en una ciudad y un país que glorifica todavía a Ayrton Senna, el famoso corredor de coches de fórmula 1, tricampeón mundial, cuya muerte por accidente en una de las carreras, paralizó el país durante tres días de luto oficial y que estos días sigue llenando el circuito donde ahora corren Vettel y Fernando Alonso en pos del mismo humo de fama.

El metro de Sao Paulo también resulta bastante insuficiente, a pesar de que el sistema posee actualmente una extensión de 74,3 kilómetros de vías férreas distribuidas en cinco líneas, conectadas por 64 estaciones. Diariamente el Metro transporta 3,5 millones de pasajeros. A finales de 2010 el Metro de São Paulo, con las obras de integración con la red de CPTM, deberá tener una extensión total de 240 kilómetros, convirtiéndolo en uno de los más extensos de América Latina. Pero todavía muy insuficiente para este tipo de población, considerando que Madrid, una ciudad mucho más pequeña, dispone de 340 Km de vías. Además, Sao Paulo no dispone ni remotamente de un sistema ferroviario que como el de cercanías de Madrid, que con sus 650 Km de red transporta de las ciudades del área metropolitana e incluso algo más allá cerca de 900.000 pasajeros diarios, con lo que toda la avenida de ciudadanos de los extrarradios se realiza por medio de transporte privado o bien transporte por autobús.

Los proyectos de ampliación de líneas de metro, van varias cabezas o mejor varias vueltas por detrás del aumento del tráfico de pasajeros. Los monorraíles que se construyen de forma onerosa sobre vías saturadas y en emergencia, no son más que parches para justificar que se hacen obras para el Mundial y violentan construcciones y edificios por los que pasan a pocos metros, desde los que los hipotéticos pasajeros verán desayunar a los propietarios de las viviendas cuyas vistas son cercenadas por estas aberraciones.

Tren aéreo 2

obras monorrail

Figuras 9 y 10. Construcción de postes de apoyo al monorraíl de Sao Paulo.

En un intento por humanizar una ciudad ya muy inhumana, el Ayuntamiento ha fijado los fines de semana y fiestas unos 120 Km de carriles exclusivos para montar en bicicleta y poder acercarse a los pocos parques que esta ciudad posee al alcance razonable de sus ciudadanos. Un ejército de contratados con chalecos brillantes y banderolas dirigen el tráfico en las muchas calles que deben cortar, para dar paso a los que tienen que atravesar los carriles marcados en algún punto.

El problema de Sao Paulo es su enorme crecimiento y su desordenado urbanismo sobre una orografía que no favorece, aunque no tiene saltos abruptos, si tiene muchas colinas ondulantes que dificultan, junto con las distancias a que obligan los desplazamientos, los traslados de los ciudadanos.

Brasil desde el aire 2

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Figuras 11 y 12. Vistas aéreas de parte de Sao Paulo, una mezcla de edificios altos de viviendas y oficinas, mezclados de forma bastante caótica con viviendas bajas y chabolas (favelas) sin la mínima infraestructura básica.

El trazado de las principales rutas dentro de la ciudad transcurre de forma muy irregular y lleva a construcciones de carreteras y autovías elevadas por doquier, para ir salvando obstáculos según la ciudad va creciendo. Como el crecimiento es rapidísimo y bastante desordenado, el resultado está en consonancia con ello.

Las infraestructuras de energía y comunicaciones son aéreas, del tipo de la mayoría de las estadounidenses y suponen unos enmarañamientos crecientes en las calles, con una dificultad considerable para ofrecer servicios adicionales a las construcciones que surgen en los huecos ciudadanos, algunas de altura considerable. Los postes de hormigón se plantan muchas veces en las aceras que terminan siendo intransitables para los peatones, sobre todo si se les suman los árboles de gran crecimiento que destrozan el pavimento.

Tendido eléctrico y de comunicaciones

Figura 13. Vista de un par de postes soportando una maraña de cables de energía para viviendas, para iluminación municipal y para comunicaciones. Los cruces con la masa de árboles y con las calles a todas las alturas, sumados a las lluvias torrenciales, provocan un sin fin de averías. A veces sobre ellos pasean macacos o monos pequeñitos.

El presupuesto de mantenimiento y reparación de estas infraestructuras tiene claramente desbordados a los responsables municipales. Independientemente de la elevada corrupción que sus dirigentes puedan cargar sobre sus espaldas, muy criticada por los ciudadanos de la misma forma que en España, en cualquier caso no debe ser sencillo mantener saneada la infraestructura de los municipios que componen el gran Sao Paulo, que es una mancha de unos 70 km. de ancho en dirección oeste-este, por unos 50 Km de ancho, en dirección norte-sur.

Aterroriza pensar en las necesidades de agua potable (que suele ser de muy irregular calidad), de saneamientos y sobre todo, de lo que no me he atrevido a investigar: los vertederos y el tratamiento de residuos sólidos urbanos para 230 millones de habitantes: distancias a recorrer, flota necesaria para la evacuación diaria de las basuras, tratamientos de reducción o quema o enterramiento, volúmenes de desechos, etc.

20131123 rio Pinheiros y vista de Sao Paulo

Figura 14. El río Pinheiros, altamente contaminado, en cuyas riberas se ha desplegado una autovía, la Marginal, que está frecuentemente colapsada. Al fondo, el puente Octavio Frias de Oliveira, conocido como Ponte Estaiada y grandes edificios construidos o en construcción al fondo.

Llegando al punto de ebullición sin notarlo

El pasado jueves 14 de noviembre de 2013, El «puente festivo» por el Día de Proclamación de la República, celebrado el 15 de noviembre, batió el récord de 306 kilómetros de embotellamiento en la ciudad y en las autopistas que comunican la capital con el interior del estado y el litoral, donde muchos buscaban pasar un fin de semana playero .

Los grandes atascos suelen estar relacionados en Sao Paulo con días de lluvia en fin de semana o por accidentes de tráfico, a los que las ranas suelen acudir para justificar el calor que existe en la olla, sino por el exceso de vehículos en movimiento tratando de salir de la ciudad.

Un viaje a la playa entre el centro de Sao Paulo y una ciudad veraniega como Joquehí, distante 150 kilómetros y que normalmente lleva unas tres horas, tardó para muchos paulistas entre siete y doce horas durante este fin de semana.

El moderno sistema de autopistas y túneles de las carreteras que unen el eje entre el gran Sao Paulo y la costa, bien sea al puerto de Santos o a las playas más al norte, tiene dos ramales principales de difícil construcción por su abrupta orografía, el de Imigrantes y Anchieta, que registraron embotellamientos con colas de casi 100 kilómetros. El tráfico para turismos y camiones se mezcla en medio de un desorden considerable. Termina por completar el caos la existencia de una refinería y plantas de producción de acero y fertilizantes de Cubatão, a 12 Km. de Santos. Esta pequeña ciudad, cercana a la vía entre Santos y Sao Paulo alberga 24 industrias, refinerías de petróleo, la fabricación de acero y fertilizantes. Ciudad rica en lo económico con una población pobre y diezmada por una horrible contaminación del aire; se conoce al área como el «Valle de la Muerte», debido a los nacimientos de niños sin cerebro y las enfermedades respiratorias, hepáticas y de la sangre. Se clasificó entre las diez ciudades más sucias del mundo por la revista Popular Science. Es el tributo a pagar para mantener a la población que vive más arriba, en la capital financiera y comercial de Brasil.

A la gigantesca subida de mercancías desde el puerto de Santos hacia el gran Sao Paulo, la mayoría en contenedores, que alcanzan la cifra de cerca de 3 millones de TEU’s sólo en Santos (un TEU es un contenedor de 20 pies, que puede pesar unas 20 toneladas) y que significa que en promedio se descargan y mueven hacia destino entre 8 y 10.000 contenedores diarios, hay que sumar el descomunal tráfico, también por carretera, de infinidad de camiones cargados con soja (17 millones de toneladas en 2012), arroz (1 millón de toneladas), café (43 millones de sacos de 60 kilos) o azúcar (27,5 millones de toneladas) que van hacia los principales puertos, siendo el de Santos uno de los principales para la exportación, para ser metidos en cargueros, a muchos países con China adoptando un papel cada vez más importante, ya que se lleva el 17% de las exportaciones brasileñas que totalizaron en 2012 unos 246.000 millones de dólares.

La concentración de mercancías es de tal calibre que el pasado 18 de octubre de 2013 se incendiaron seis grandes almacenes de azúcar de la empresa Copersugar, la mayor empresa de este producto y exportadora de etanol, destruyendo 180.000 metros cúbicos de azúcar el pasado 18 de octubre, que crearon, en palabras de algunos testigos presenciales, un verdadero tsunami de caramelo en la zona superando el realismo mágico de García Márquez o los deseos de Juan Luis Guerra de que llueva café en el campo.

El anuncio de que esta temporada se espera la mayor producción de soja de la historia de Brasil y la tercera mayor de maíz, va acompañada de un verdadero colapso portuario en los principales puntos de salida del producto, verdaderos cuellos de botella.

Como es lógico, el deterioro de las principales vías de circulación con este enorme tráfico pesado y su aumento incesante es evidente y a su vez produce numerosas averías en coches y camiones que tienen que sortear constantemente los baches y agujeros que ellos mismos crean, sin apenas tiempo para repararlos, aumentando sus costes, tanto por averías, como por el tiempo extra que necesitan para llevar la carga a destino.

En un caso conocido, un contenedor con la mudanza de una persona que salió de Campinas, cerca de Sao Paulo el mes de julio de 2013, recibió el contenedor en Bogotá a finales de octubre.

En el tráfico urbano, los embotellamientos no sólo son debidos a los fines de semana lluviosos o para salir a las playas. El día a día dentro de la ciudad puede ser horrible en el tráfico. Un simple ciudadano que choca con un poste lo derriba y ocupa tres carriles de una gran vía, deja todo Sao Paulo colapsado durante medio día.

La duración promedio de un desplazamiento entre un lugar cualquiera del centro de Sao Paulo y su aeropuerto internacional, el de Guarulhos, debe estimarse, por razones de seguridad, en unas tres horas. El día del gran atasco, un conocido que volvía a Madrid, salió de la oficina a las 15.00 horas para tomar un vuelo a las 21.00 horas y perdió el vuelo, llegando al aeropuerto una hora más tarde de la salida. La gran mayoría del pasaje que salía de Sao Paulo también lo perdió.

No hay rutas alternativas o de peaje para que los que tienen medios se puedan ahorrar parte de su tiempo. La única que se practica, consiste en utilizar helicópteros, desde grandes edificios corporativos que los poseen para desplazarse por la ciudad.

Algunos paulistas presumen de tener la ciudad con la mayor flota de helicópteros del mundo para estos usos . Es la salida que se le ocurre a la rana con posibilidades económicas cuando intuye que el agua de la olla está calentándose y se encuentra algo molesta: se paga un refrigerador portátil peor sigue en la olla, que es dónde tiene el negocio.

Sao Paulo es el único sitio del mundo que he conocido en el que muchos departamentos de Recursos Humanos de las empresas valoran como un gran activo, por encima de otros, que el aspirante a un puesto de trabajo, viva relativamente cerca de la oficina o centro en el que trabajará. Sus conocimientos y aptitud para el puesto se valoran después.

Cuando millones de personas trabajadoras necesitan un promedio de dos horas para ir de casa al trabajo y otro tanto para volver, suponiendo que su trabajo es de 8 horas diarias, significa esto que deben emplear un 50% adicional de su tiempo y esfuerzo sólo para llegar a trabajar. El símil para estas inmensas agrupaciones urbanas modernas, podría ser el equivalente al de las pequeñas tribus africanas que viven en la franja limítrofe del creciente desierto del Sahara y que a medida que este crece, se ven obligadas a andar más y más para recoger leña para cocinar o para conseguir agua potable, en la medida de sus limitadas fuerzas y caminando, que son tres o cinco kilómetros desde sus aldeas, ya que no poseen medios de transporte con motores de combustión. En el caso de los habitantes de Sao Paulo o ciudades enormes equivalentes, el límite en la movilidad motorizada pueden ser quizá 40 ó 50 km de distancia entre hogar y centro de trabajo ¿Cuándo llega el momento del colapso para unos y otros, por la imposibilidad física? ¿Cuáles son los límites del gasto económico y energético soportable?

Obviamente, para los optimistas, cabe la posibilidad de que mejoren las infraestructuras radicalmente (algo que ahora no veo) y que el aumento de población no conlleve un aumento del consumo, por mejora de rendimientos. Eso sería creer mucho en el futuro y en la mejora de los rendimientos o la mayor eficiencia tecnológica.

Veremos qué depara el futuro. Al menos Brasil está exportando alimentos básicos y tiene energía cercana a la autosuficiencia. Pienso también en cómo afectaría a grandes poblaciones humanas, tan grandemente dependientes de alimentos que les llegan del otro lado del mundo, que Brasil, por causa de un colapso social, energético o de cualquier tipo, dejase de exportar la enormidad de alimentos que ahora exporta. Los cordones umbilicales de esta sociedad moderna, tan tecnificada y mecanizada, son hilos muy frágiles del soporte vital de cientos de millones de personas, que esos mismos millones de personas creen que jamás podrán cortarse. Mejor que sigan así.
Pedro Prieto.

Sao Paulo, 27 de noviembre de 2013.


World Energy Outlook 2013

Actualización: por lo visto hay más con el tema de la supuesta era de abundancia petrolera que no lo es tanto, el Financial Times titula «International Energy Agency warns of future oil supply crunch«. Y cita a Fatih Birol, que antes de la fiebre del fracking y el shale oil, era el vocero del lado pesimista de la AIE (algo que se lo debemos a los pikoleros, peak oilers o como se diga). La cosa va de que los productores de Oriente Medio, ante tanta propaganda sobre el futuro brillante de la producción petrolera estadounidense, están en plan «verlas venir», y podrían estar aplazando sus inversiones en capacidad de producción. Pero el propio WEO 2013 advierte de que la producción de shale oil llegará a su cima en 2020, contradiciendo así todo el hype que nos han vendido sobre los EE.UU. y su retorno al primer puesto del ranking de productores de petróleo. ¿Quién dijo que el peak oil estaba muerto? Ahora nos dice Birol que lo que necesitamos es otra ronda, más cara que la anterior, y rezar para que no se note nada (léase, se hunda la «economía» de nuevo).

* * *

Hoy se ha publicado el World Energy Outlook 2013, publicación que edita la Agencia Internacional de la Energía (agencia que pagamos con nuestros impuestos todos los nacionales de los países de la OCDE). Suele ser un tocho enorme, y aún no lo tengo, pero me han llamado la atención estos dos párrafos de la presentación:

Technology and high prices are opening up new oil resources, but this does not mean the world is on the verge of an era of oil abundance.

(…)

Energy-related carbon-dioxide emissions are projected to rise by 20% to 2035, leaving the world on track for a long-term average temperature increase of 3.6 °C, far above the internationally-agreed 2 °C climate target.

Respecto al petróleo, nada que decir que no sepamos ya, lo que para unos es muestra de abundancia para otros (al menos para mi) es sintoma de que estamos ya rebañando el plato. En cuanto al tema de las emisiones de GEH, en el WEO 2008 se nos decía que

El sistema energètico mundial se encuentra en una encrucijada. Las tendencias actuales del subministro y consumo de energía son claramente insostenibles, tanto desde el punto de vista ambiental como del económico y social.

En el WEO 2011 se nos decía esto

Hay pocos signos que indiquen que esté en marcha el urgente cambio de rumbo necesario en las tendencias energéticas mundiales. No podemos permitirnos retardar más los esfuerzos necesarios para afrontar el cambio climático si se pretende limitar la temperatura media mundial a 2º. El camino emprendido hasta ahora resulta en una peligrosa elevación de la temperatura en 6ºC o incluso más.

Y el año pasado el WEO 2012 decía esto:

Teniendo en cuenta los nuevos desarrollos y políticas, el mundo todavía no ha puesto el sistema energético global en un camino más sostenible. La demanda global energética crece más de un tercio hasta el 2035,  de la cual un 60% corresponde a la China, India y Oriente Medio. A pesar del crecimiento de las fuentes energéticas bajas en carbono, los combustibles fósiles son todavía dominantes en el conjunto de la energía mundial.

Teniendo en cuenta la inercia que llevamos y lo costoso que es cambiar el sistema energético mundial, algo que sin duda saben los expertos que escriben el WEO, me pregunto qué van a decir en los próximos años. Igual cierran la AIE y el WEO, total, para lo que sirven…